LATAM asegura proteger los viajes del 85% de sus clientes ante la huelga en Chile y enfatiza en la necesidad de prepararse ante la competencia

Por Ricardo J. Delpiano

Foto: Ricardo J. Delpiano

A pesar de la disposición a los buenos oficios y en la voluntad de fin de explorar soluciones a las demandas de sus trabajadores, LATAM enfrenta desde este martes la huelga del Sindicato de Tripulantes de LAN Express (STLE) que agrupa a 1.000 trabajadores. Se trata de una medida fuerza que desde hace años no es vista en el transporte aéreo en Chile, que surge en un momento de transición de la aviación chilena con el auge de nuevos modelos de negocios en las líneas aéreas.

“Lamento el impacto que la huelga va a tener en nuestros pasajeros”, dice Claudia Sender, vicepresidente Senior de Clientes de LATAM. “Sabemos que la aviación es parte del día a día del chileno y por eso desde la semana pasada, nos anticipamos a los potenciales impactos de huelga de nuestros clientes con un itinerario del día 10 al 16 de abril, donde logramos proteger el viaje del 85% de nuestros clientes (afectados)”.

La reestructuración de los itinerarios en Chile, implica una cancelación de 623 vuelos y la reprogramación de otros 260, proyectándose un impacto significativo en los pasajeros dado la capacidad que tienen los aviones que operan en rutas nacionales como por la duración de la medida. La huelga afecta a los vuelos domésticos en Chile, a excepción de Isla de Pascua, y también incluye selectos vuelos desde/hacia Sudamérica. Las operaciones de larga distancia como los que son realizados por otras filiales no se verán afectados. No obstante, los pasajeros con origen en algún punto de Chile más allá de Santiago, podrían ver afectada su conexión.

Para tal propósito, LATAM indica que ha tomado contacto con los pasajeros afectados y agencias de viaje, para informarles sobre la situación de sus vuelos y ofreciendo las facilidades para reprogramar su viaje o solicitar la devolución del pasaje sin costo, según la fecha de su vuelo. “Hasta la fecha, un 85% de los pasajeros afectados ya han modificado su fecha original de viaje”, dice la compañía. Sender pide que el 15% de los pasajeros que no se ha logrado proteger, ingresen al sitio web de la empresa y vayan a la sección de maneja tu viaje, para ver las opciones de reprogramación de su itinerario o devolución del pasaje.

A pesar de la consolidación comercial de la marca, LATAM en su estructura interna todavía está conformada por distintas empresas como por ejemplo, la encargada de realizar los vuelos domésticos en Chile y algunos puntos de Sudamérica, conocida antes de la fusión como LAN Express, que deriva de su antecesora LADECO. De ahí, que el STLE mantenga esa denominación y que sólo uno de los vuelos de LATAM en Chile estén afectados.

STLE demanda la adecuación de las jornadas laborales en lo que respecta a la secuencia de asignación de turnos y los tiempos de descanso, que según su parecer estarían afectando a más de 1.000 tripulantes de cabina. A esta demanda se agrega otra, de solucionar el petitorio de un sector en desmedro de otro, que estaría representado por los nuevos trabajadores que ingresen a la compañía.

“Hemos hecho esfuerzos importantes para buscar un acuerdo, que incluyen el principal requerimiento del Sindicato que es el sistema de turnos de trabajo. Si bien la ley en Chile permite programar hasta 10 días continuos de trabajo por 4 de descanso, la compañía accedió a ofrecer programación de hasta 7 días de trabajo por 4 de descanso, jornada que comparativamente con el resto de los países de la región y Estados Unidos por ejemplo, es la que contempla la mayor cantidad de días de descanso por turno”, explica Sender. La empresa asegura además que “las condiciones actuales que tienen los Tripulantes de Cabina LAN Express son las mejores de la industria en Chile y sus remuneraciones superan en 30% al promedio de la industria”.

Como para cualquier línea aérea, la preocupación por la seguridad del vuelo es la prioridad número uno para LATAM. “En todos los países donde estamos, operamos más de 1.400 vuelos al día bajo los más estrictos estándares de seguridad mundiales. Trabajamos con otras líneas aéreas en el mundo en el desarrollo de estándares de reducción de fatiga para que no sólo nuestros tripulantes sino que el personal de tierra trabaje garantizando la seguridad”, dice la vicepresidente Senior de Clientes de la mayor línea aérea de América Latina.

En este conflicto, destaca la capacidad de anticiparse a escenarios adversos y proteger a los pasajeros, una de las características históricas que distingue a LATAM. Sin embargo, dado el crecimiento de la empresa y el volumen de pasajeros que diariamente moviliza en la región, es posible que existan afectados. Por lo mismo la línea aérea insiste en que los pasajeros se contacten y exploren las soluciones que se ofrecen.

Con el fin de asegurar una sostenibilidad en el tiempo, LATAM ve en la necesidad de transformarse ante un incremento de la competencia y el surgimiento de nuevos modelos de negocios que tienen a Chile como protagonista, en una directa relación con el surgimientos de compañías de bajo costo y tarifas bajas (LCC, por sus siglas en inglés). “Nosotros en Chile, vivimos una situación competitiva muy diferente a la que teníamos hace algunos años. La entrada de empresas low cost hace que LATAM tenga que prepararse para estar en un nivel competitivo,” sentencia Sender. “Debemos estar al mismo nivel o competir a un nivel más parecido de las otras empresas que operan en el mercado domésticos. Para ello estamos en negociaciones consistentes con nuestros sindicatos para garantizar la sostenibilidad de la compañía”.

Cabe recordar que en 2017, LATAM realiza una profundización de su modelo híbrido de negocios con el fin de atender el crecimiento de la oferta LCC representadas por SKY y JetSMART. En los próximos años, se espera que las LCC representen en los próximos años entre  40,0% y 50,0% de los vuelos domésticos en Chile, lo que determina cambios en el resto de los operadores. Con los vuelos cancelados y reprogramados de LATAM, son estas compañías las que se convierten en la única alternativa para los clientes.

Por la reducción de la oferta y el alto volumen de pasajeros que busca compensar el impacto de la medida de fuerza en LATAM, se espera que los precios en la competencia puedan incrementarse dado la mayor disposición a pagar por parte de los usuarios. Además hay que agregar que a menor anticipación de compra y más inmediato sea el viaje, mayor será el valor del pasaje.

En SKY, descartan un alza significativa, arbitraria y coyuntural de los pasajes aéreos, señalando que sus pasajes se mantienen a valores de la industria. En ese sentido, desechan denuncias al respecto en medios de prensa en valores para la ruta Santiago – Punta Arenas, aludiendo a que valores que se pueden haber informado corresponden a precios de un intermediario y no a los de la línea aérea.

SKY declara que “reitera que hará sus mayores esfuerzos para aumentar las frecuencias de sus aviones en los trayectos más afectados de modo de minimizar los inconvenientes para sus usuarios y sin renunciar a nuestra política de ofrecer siempre las tarifas más convenientes para nuestros clientes”.

Durante distintos ejercicios comparativos, las tarifas ofrecidas por SKY como por JetSMART mantienen un comportamiento estable siendo relativamente similares en las rutas que operan, más allá de la contingencia que afecta a LATAM.