lunes, 17 de febrero de 2020

Futuro espigón A del aeropuerto de Santiago aportará ocho nuevas posiciones de contacto para vuelos domésticos

Por Ricardo J. Delpiano

SCL terminal 1 construcción espigón A (RD)
Foto: Ricardo J. Delpiano
Por su importancia ante el crecimiento del tráfico doméstico como consecuencia de las políticas de estimulación de la demanda por parte de las líneas aéreas, el futuro espigón A es una de las obras dentro de la ampliación del aeropuerto de Santiago más esperadas. Ubicado en el sector occidental del terminal antiguo contiguo a la puerta 15, ofrecerá nuevas salas de embarque y posiciones de contacto para las aeronaves con las cuales completarán el edificio y lo prepararán para su futuro rol: atender sólo vuelos nacionales.

A fecha de hoy, el espigón A presenta un rápido avance con la instalación de su estructura metálica y también con la de su cubierta. Desde el lado aire ya se aprecian los avances especialmente en su parte más occidental. Su construcción es posible con la puesta en funcionamiento de los espigones C y E, los cuales han sido claves para ampliar la capacidad del aeropuerto y ubicar a la mayoría de los vuelos internacionales, especialmente aquellos realizados con aviones de fuselaje ancho. Los espigones C y E -así como el D y F que se construyen en el lado oriente y el edificio procesador central-, corresponden al futuro terminal 2, pero su habilitación permite el cierre de antiguas puertas de embarque (10 a 14) que dan paso a la construcción del espigón A.

De acuerdo con Nuevo Pudahuel, sociedad concesionaria que administra y amplía el aeropuerto Arturo Merino Benítez de Santiago, el futuro espigón A posee una superficie de 15.700 metros cuadrados (m2) en los que será posible colocar hasta ocho nuevas posiciones de contacto (puentes de embarque).

La construcción de este nuevo espigón sigue la línea de diseño de desarrollada en el antiguo terminal. Por la cantidad de posiciones de contacto, se infiere que tendrá una lógica muy similar a la dispuesta en el terminal doméstico actual, es decir, puertas de embarque ubicadas más cerca una de otra. Dado el tipo de aeronave que las líneas aéreas utilizan en los vuelos domésticos, en su gran mayoría aviones de un solo pasillo como los Airbus de la familia A320 y Boeing 737, además de otros que eventualmente puedan incorporarse en el futuro, el espigón A no necesita de “cajas de estacionamientos” en sus máximas dimensiones. No obstante, considerando la reciente utilización de aviones de fuselaje ancho en algunos vuelos domésticos específicos como Santiago – Antofagasta y Santiago – Punta Arenas, por ejemplo, además de la ruta a Isla de Pascua, las posiciones de contacto del sector central del edificio antiguo pueden ubicar a equipos B767-300ER, B787 u otros.

Se espera que el espigón A entre en servicio en el transcurso del próximo año al igual que los dos espigones, lo que representa las últimas etapas del proceso de ampliación del aeropuerto capitalino. Una vez que el terminal internacional (terminal 2) esté operativo, el edificio antiguo o terminal 1 pasará a estar dedicado sólo a los vuelos nacionales. Su habilitación brindará mayor capacidad que la que existe actualmente, satisfaciendo en parte una de las demandas de las líneas aéreas respecto a la mayor disponibilidad de posiciones para los vuelos domésticos.

Adicionalmente, permitirá contar con más flexibilidad al brindar oportunidades para que el concesionario en conjunto con las líneas aéreas y Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) estudien o implementen nuevos procedimientos de embarque.

En un coloquio de transporte aéreo desarrollado en 2017, Nuevo Pudahuel indica como opciones la utilización de salas de embarque al mismo nivel de la plataforma donde no sea necesario el uso de las mangas y los procesos walk-in/walk-out del terminal en los que se utilizan ambas puertas del avión con la delantera conectada a una manga y la trasera para embarque mediante escaleras (también denominado mixto). En su momento, se había mencionado la salida autopropulsada de aeronaves, pero la habilitación de posiciones de contacto descartaría esta alternativa. Estas alternativas se mencionan ante la llegada y crecimiento de líneas aéreas de bajo costo y tarifas bajas (LCC, por sus siglas en inglés).

Las proyecciones del concesionario señalan que alrededor del 40% de los pasajeros del aeropuerto pertenecerá a las LCC. En los vuelos domésticos el porcentaje aumentará a un 45%-50% por el predominio que tienen estas compañías (SKY y JetSMART), mientras que en los internacionales será entre el 25%-30%. No obstante, la exploración constante de procedimientos orientados incrementar las eficiencias en los turn around hacen que no necesariamente las LCC puedan utilizarlos. Una prueba de esto, es el uso del embarque/desembarque mixto por parte de LATAM en una de las posiciones de contacto en Puerto Montt.

Mientras el espigón A se construye, el traslado de las operaciones internacionales hacia los nuevos sectores del aeropuerto permite la habilitación de más posiciones para vuelos domésticos como las puertas 19 y 20, cuyas respectivas cajas de estacionamientos, permiten ubicar simultáneamente a dos aviones de fuselaje angosto. De esta manera, se amplía al doble la capacidad en esas dos puertas.

Considerando el crecimiento que se proyecta en el tráfico de pasajeros e incremento en el parque de aeronaves, una de las preocupaciones de la industria es la necesidad de materializar las obras de mitigación que considera el “gatillador de inversiones”. En mayo 2019, el Ministerio de Obras Públicas (MOP) manifiesta su disposición a su activación para evitar futuras asimetrías entre el crecimiento del transporte aéreo y la infraestructura.  El “gatillador de inversiones” está inserto en el contrato de licitación del aeropuerto de Santiago. Establece que cuando se alcancen 2.200 pasajeros internacionales o 3.200 pasajeros domésticos en hora punta se deben construir dos espigones adicionales para incrementar la capacidad hasta 45 millones de pasajeros.

Según el último reporte de tráfico de Nuevo Pudahuel, el aeropuerto Arturo Merino Benítez de Santiago registra en 2019 un movimiento de pasajeros de 24,6 millones de pasajeros en vuelos domésticos internacionales. La cifra representa un crecimiento de 5,6% en comparación con 2018 y de acuerdo con los reportes de instituciones como de otras líneas aéreas se infiere que está impulsada principalmente por los tráficos domésticos.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Las puertas de embarque nacional actual serán el espigón B y este nuevo el A, me imagino las puertas del lado actual se renombrarán a B01, B02, etc... y las del espigón A serán A01, A02..., pero qué pasará con las puertas del cuerpo central del aeropuerto (de la 15 a la 20)?

Anónimo dijo...

Ricardo, sabes si remodelarán todo el terminal actual y sus espigones? Ojalá sea así, ya se ve demasiado noventero y se necesita reorganizar la distribución de las cosas, ya uno anda atropellándose dentro

Ricardo J. Delpiano dijo...

Hola

El terminal actual se mantiene con el diseño original. Las remodelaciones son en el interior.

Saludos,

Ricardo J. Delpiano

Anónimo dijo...

¿ Van a "limpiar" la terminal actual de todas las tiendas y demases que se han instalado durante los últimos 15 años?, parece un bazar o persa, estrecho y desagradable en las horas punta.

Anónimo dijo...

Ya es oficial, se termina la ruta Santiago Roma de Alitalia, a partir de abril
Una lástima

Anónimo dijo...

El espigon C y E estan bien, salvo que las decoro un monje de claustro. Con respecto a la zona central tienen mucha pega para mejorarlo. Por lo demas es necesario poner aduanas en los espigones internacionales, es un desastre cuando existen varios vuelos simultaneos en el aerouerto.

Anónimo dijo...

Ojalá que en el terminal central no reemplacen los actuales porcelanatos blancos por esos grises depresivos que pusieron en los espigones C y E

Anónimo dijo...

Yo creo que la decoración de los espigones va de acuerdo con la forma de ser del Chileno (y no lo digo en forma de crítica).