Nuevo Pudahuel anuncia para fin de año el primer boulevard en un aeropuerto de Chile, mientras ultima detalles del espigón E

Por Ricardo J. Delpiano

Foto: Felipe González

Caminar por espacios verdes, abiertos en los cuales será posible asistir a espectáculos, comprar o simplemente pasear mientras se está próximo a embarcar en un vuelo o simplemente acompañar a un familiar ya no será un sueño para los usuarios. Esto porque a partir de fin de año, Nuevo Pudahuel dispondrá del primer boulevard cívico en un aeropuerto de Chile. La obra forma parte del cambio que la sociedad concesionaria busca conseguir para el aeropuerto de Santiago en conjunto con el necesario mejoramiento y ampliación de la infraestructura.

El primer boulevard aeroportuario estará ubicado en el techo del edificio de estacionamientos poniente – Expreso 2 actualmente en construcción. Si bien edificio estará abierto hacia fines de agosto junto con los estacionamientos, la decisión de abrir el paseo a fin de año responde al tiempo de habilitarlo con los jardines, equipamiento y los servicios que contará esta parte del terminal.

Según la concesionaria que administra, construye y mejora el aeropuerto Arturo Merino Benítez de Santiago, el boulevard contará con áreas verdes, locales comerciales y un centro de arte de 470 metros cuadrados (m2). Conectará el procesador central del futuro terminal 2 con el terminal nacional (edificio actual) de una manera más amigable y única. Para su ornamentación exterior, se colocarán muros verdes con plantas y flores, de manera tal, de cubrir la fachada gris clásica de este tipo de edificios.

Además de ser el primer boulevard de un aeropuerto chileno también será el primero de un terminal aéreo en Sudamérica y es un ejemplo de la mejor experiencia que el usuario podrá disfrutar en el aeropuerto de Santiago. La decisión de incorporar estos espacios forma parte de la propuesta de servicio que Aéroports de Paris (ADP) y Vinci Airports tienen para los aeropuertos que administra, tal como ocurre, por ejemplo, en París (CDG) donde junto con embarcarse en un vuelo, el pasajero encuentra hoteles, tiendas, zona de juegos y entretenimientos varios, bibliotecas, exposiciones.

Lo anterior, va en línea con la concepción moderna e inclusiva que se tienen para los aeropuertos en los que los terminales aéreos son más que un lugar de embarque o de llegada para transformarse en verdaderos foros cívico donde las personas pueden interactuar y vivir distintas experiencias acompañada de una gran variedad de servicios.

El edificio de estacionamientos poniente – Expreso 2 abrirá junto con el espigón E. Dispondrá más de 1.500 espacios distribuidos en tres niveles, uno ubicado en subterráneo. Mientras los espigones utilizan los colores asociados a cada zona geográfica de Chile, cada piso del estacionamiento se identificará con un color y un animal diferente. Este edificio estará acompañado con otro igual en el sector oriente y contará también con diversos espacios de esparcimiento. Ambos forman parte del compromiso de habilitar 5.800 plazas en comparación con las 3.730 actuales.

Actualmente, Nuevo Pudahuel ultima detalles del espigón E para su apertura en las próximas semanas. El espigón E posee una superficie de 26.700 m2 y cuenta con tres niveles (técnico, desembarque y embarque, respectivamente), 1.600 m2 de locales comerciales y de comida, de los cuales 250 m2 corresponden a Duty Free. Son 13 locales comerciales que incluyen a nuevas marcas como Eric Kayser, Samsonite, Huawei. También están habilitadas zonas para niños, un espacio de arte (4 m2) y WiFi gratuito que ya funciona en el edificio pese a que todavía no está abierto. La temática que acompaña a esta parte del futuro terminal 2 es la Región de Los Lagos, por lo que predominan los colores verdes y azules.

En el lado aire, el espigón E cuenta con 12 posiciones de contacto dobles (puentes de embarque), permitiendo atender a una aeronave de fuselaje ancho utilizando las dos puertas delanteras o bien a dos aviones de fuselaje angosto en forma simultánea. Dispone de dos posiciones de contacto más que el C, abierto desde diciembre, y su principal contribución será compensar el cierre de los puentes 10, 11, 12 y 14 por las obras de ampliación del terminal actual para dar paso al espigón A. Con el nuevo edificio se amplía la capacidad del aeropuerto disminuyendo la presión que existe sobre la infraestructura actual.

Debido a que los puntos de revisión de seguridad y filtros de seguridad (AVSEC) se mantienen en las actuales dependencias, los pasajeros que utilicen el espigón E deben tomar los resguardos correspondientes en sus traslados por el terminal por la mayor distancia a recorrer. Si al espigón C el tiempo de traslado puede ser de hasta 10 o 15 minutos, hasta el E pueden llegar a 20 minutos dependiendo de cada persona. Para facilitar los traslados, se disponen de pasarelas móviles en los pasillos conectores como en el propio espigón.

Dado que el espigón E será inaugurado en los próximos meses, esta nueva parte no podrá satisfacer el periodo de alta demanda de invierno cuando se estima un flujo de 73.000 pasajeros por día lo que representa un 9,0% de aumento en comparación con el mismo periodo del año anterior que equivalen a 194.000 pasajeros.

“A pesar de que estamos en plena construcción del terminal internacional, hemos tomado las precauciones necesarias para no impactar en la experiencia de nuestros pasajeros. Es así como cada vez que se cierran espacios de servicios, se abren nuevos de igual o mayor capacidad”, comenta Nicolás Claude, gerente general de Nuevo Pudahuel.

Actualmente, la ampliación el aeropuerto de Santiago posee un de avance cercano al 50,0% respecto de la obra total. Junto con el espigón E, Nuevo Pudahuel trabaja en las estructuras que corresponden a los espigones D y F, cuyos avances se aprecian en lado oriental del aeropuerto tras la demolición del antiguo sector de carga. El espigón D estará inspirado en la zona de Atacama, mientras que el espigón F en la zona de la Patagonia Chilena, para lo cual se ambientarán con los colores ocre y azules, respectivamente.