martes, 14 de junio de 2016

Delta busca formas alternativas para posicionar su producto ante un incremento de la competencia

Por Ricardo J. Delpiano

Delta PTV Economy (Delta)
Foto: Delta 
“La única cosa que podemos hacer mejor que operar la flota más grande equipada con entretenimiento en vuelo del mundo, es ofrecerlo en forma gratuita a todos nuestros clientes”, es la frase que dice Tim Mapes, vicepresidente Senior y director de Marketing de Delta, al comentar la última medida tomada por su compañía: ofrecer todo el entretenimiento a bordo en forma gratuita.

Se trata de una iniciativa que Delta comenzará a implementar a partir del próximo 1 de julio para todos los pasajeros que vuelen en aviones equipados con dos clases de servicio, lo que equivale al 90% del total de la flota. En términos comunicacionales, el objetivo de la compañía es que sus pasajeros que vuelan en rutas nacionales como internacionales, sientan una experiencia superior de viaje con una buena oferta de entretenimiento. En términos comerciales y estratégicos, es un mecanismo explícito para mejorar sus posición en el mercado ante el avance de la competencia.

En Delta, el entretenimiento en vuelo se entrega con el producto Delta Studio, que a través de streaming, trasmite a los equipos electrónicos personales como laptops, tablets, teléfonos inteligentes, contenidos que incluyen 300 películas, 750 programas de televisión, 2.400 canciones y 18 canales de televisión satelital, entre otros. Delta Studio está disponible en más de 1.000 aviones de la flota principal y regional, y complementa la oferta de entretenimiento a bordo colocada en las pantallas individuales en los asientos disponible en 400 aparatos.

Con internet WiFi disponible en muchos vuelos y con las tradicionales pantallas personales con programación a demanda instalada en muchos aviones, Delta está buscando mecanismos alternativos que le permitan diferenciarse del resto sea a nivel doméstico como internacional. Un proceso que en su conjunto amplían los beneficios a los usuarios.

En los Estados Unidos, Delta debe competir al mejoramiento significativo del producto que líneas aéreas como American Airlines y United están realizando, además de la fuerte incursión que compañías como JetBlue y otras están realizando. Este mejoramiento general de la oferta que se está viendo en todas estas compañías estadounidenses es un resultado directo del crecimiento e impacto de las aerolíneas de bajo costo y tarifas bajas (LCC, por sus siglas en inglés), que través de una mayor eficiencia de todos sus procesos han sido capaces de adoptar nuevas tecnologías y aplicarlas en beneficio directo de sus pasajeros.

En los mercados internacionales, el mejoramiento de la oferta también es una forma de enfrentar la creciente competencia. Si bien Delta ha conseguido fortalecer su presencia en el segmento internacional con alianzas globales y bilaterales -como los joint ventures-, la expansión de otras líneas aéreas hacia los Estados Unidos, nuevos pares de ciudades conectados y el crecimiento de aerolíneas del tipo LCC en algunos mercados están imponiendo nuevos y más altos estándares que deben ser incorporados para mantenerse vigente en el mercado.

Durante los últimos años, Delta ha venido realizado inversiones significativas relacionadas con la experiencia del cliente y la confortabilidad de los viajes. Entre estas destacan el retrofit de las cabinas y baños, instalación de sistemas de entretenimiento a bordo en el respaldo de los asientos, iluminación LED, toma corrientes en todos los asientos independiente de la clase de viaje, entre otras.

Con un escenario altamente competitivo, no se descarta que Delta continué creando alternativas para conservar a sus clientes y atraer a otros nuevos a medida que amplía la accesibilidad al viaje en avión. 

No hay comentarios.: