Air France realiza el último vuelo comercial con aviones Boeing 747 y se prepara para su adiós final

Por Ricardo J. Delpiano

Foto: Air France

El Boeing 747 es prácticamente parte del pasado de Air France, luego de que ayer, 10 de enero, se realizara el último vuelo comercial de este avión en la ruta París (CDG) – Ciudad de México – París, el cual cerró una etapa llena de logros y alcances en los annales de la aerolínea francesa.

Desde que fue anunciado, el último vuelo del B747 ha causado sentimientos encontrados. Por un lado, la expectación y emoción de pasajeros, trabajadores y entusiastas del transporte aéreo por ser parte de la historia y por otro, la transición hacia nuevos tiempos, en los que los antiguos cuatrimotores dan paso a nuevos aviones más eficientes en el marco de un concepto sustentable del transporte aéreo. “Air France despide con emoción el último vuelo de su Boeing 747”, decían los pendones de la aerolínea dispuestos en los aeropuertos Charles De Gaulle de París como en Benito Juárez de México DF reflejando parte del ambiente.

Más allá de la carga emotiva que sólo un retiro de una aeronave tan emblemática como el Jumbo Jet puede dar, el último vuelo del B747 de Air France no fue diferente a cualquiera de los que haya realizado, operándose cada uno de sus tramos con total normalidad sin ningún tipo de contingencia. Un certificado a cada pasajero con la historia del avión y de su rol en la ruta a México, fue el recuerdo tangible del adiós para aquellos privilegiados aunque la experiencia misma, constituirá sin dudas la principal remembranza.

A su llegada al aeropuerto de Ciudad de México, la última tripulación fue recibida y despedida con honores. Pilotos y personal aeronáutico cerraban filas a su paso como si se trataran de “héroes” de alguna hazaña. En otro lado del terminal, las pantallas sobre los mostradores de check anunciaban a los viajeros el vuelo AF439 estaba a tiempo para decir adiós al B747.

Algo similar ocurrió la mañana de hoy 11 de enero cuando el vuelo AF439 aterrizaba a horario en una de las pistas del aeropuerto Charles De Gaulle de París. El concesionario Aeroports de París y el cuerpo de bomberos del aeropuerto rindió honores al avión con un tradicional arco de agua mientras que en los exteriores del aeropuertos cientos de personas entre trabajadores de Air France, amantes de la aviación o simples curiosos hacían lo suyo en los alrededores y tal como ocurrió en México, la tripulación también fue despedida con aplausos.

Para la aviación comercial mundial como para Air France, el B747 es todo un emblema, símbolo del progreso tecnológico e ingeniería global y de los deseos de una industria por ofrecer un mayor acceso al transporte, al comercio, a la conectividad y a la oportunidad de brindar nuevos servicios a un número mayor de personas.

Air France operó casi todas las versiones del B747 (B747-100, B747-200/-200C/-200F, B747-300 y B747-400/-400C/-400F) con un total de 73 aviones entre 1970 y 2015, los que permitieron la expansión de la red global de la compañía. En los 45 años en la flota, Air France lo llevo a casi todo el mundo formando parte de los servicios regulares a varias ciudades de los Estados Unidos, Canadá, el Caribe, África, Medio Oriente, Asia y por supuesto, Latinoamérica, especialmente hacia los países del sur tal como en sus inicios lo hiciera L’Aeropostale.

Al igual que la compañía, el B747 fue un verdadero embajador de Francia llevando en cada vuelo una parte del país a cada destino donde llegaba. Los menús creados por los chef franceses como Paul Bocuse, Gaston Lenôtre y Pierre Troisgros, quienes con este avión forjaron alianzas con Air France como el interior de la cabina fue diseñada por Pierre Gautier-Delayem fueron algunos ejemplos.

Foto: Air France

Con el B747, Air France contribuyó a democratizar el transporte aéreo en el mundo y por esto, su despedida tiene que estar a la altura. Para esta semana, la compañía ha programado vuelos especiales sobre Francia con los que rendirá un tributo adecuado a los que pueden acceder cualquier persona. Inicialmente, iba ser un vuelo programado para el 14 de enero pero la alta demanda por ser parte de la historia motivó a Air France a programar un segundo adiós para el día 17 de este mes.

Air France dice sólo en diciembre recibió más de 30.000 mil llamados de personas interesadas en comprar uno de los boletos de 220 euros que se ofrecen para el vuelo especial AF747 y como respuesta, realizó un esfuerzo adicional para programar un segundo vuelo. El día 17 de diciembre, 200 asientos del segundo vuelo estaban completamente agotados.

“Air France ama al 747” y por lo mismo lo está honrando en distintas formas. A través de sus redes sociales, por ejemplo, la compañía está rescatando cada aspecto de la aeronave, la experiencia a bordo de sus pasajeros y por supuesto, la de quienes han tenido la oportunidad de hacer del “Jumbo Jet” parte de sus vidas. A los clientes, simplemente el eterno agradecimiento por cerrar un capítulo de esta historia.