Por Ricardo J. Delpiano
No hay duda de que JetBlue
tiene puestos sus ojos en América Latina. Considerado casi un mercado natural
para las aerolíneas norteamericanas, la bonanza económica y el crecimiento
mostrado por la mayoría de sus países han cautivado el interés de varias
aerolíneas.
En los dos últimos años, la aerolínea con base en Nueva York-Kennedy ha duplicado sus operaciones en la región y su crecimiento en el mercado latino, responde a la capacidad de la aerolínea combinar una oferta y crecimiento equilibrado con un modelo de negocios que le ha permitido adaptar el modelo low cost para capturar un mayor tráfico Premium.
En 2012, un tercio de la red de la compañía estaba conformada por rutas desde/hacia América Latina y el Caribe, llegando incluso hasta Colombia, país que asumirá un rol clave en el siguiente paso que JetBlue de en la región. Sus últimas conquistas, fue de convertir a Puerto Rico en uno de sus principales mercados, relegando a operadores tradicionales como American Airlines. En ese sentido, el abandono por parte de esta última de la base en San Juan, entregará más herramientas para que JetBlue continúe creciendo. Durante el año pasado, la compañía incrementó en 2,8% la capacidad ofrecida medida en asientos disponibles por kilómetro.
De acuerdo a las declaraciones esgrimidas a Flightglobal por parte de John Checketts, director de planificación de rutas de JetBlue, la compañía espera crecer un 10% anual en 2013. Entre los nuevos destinos están por ahora las frecuencias desde Fort Lauderdale a Medellín, Colombia y a San José de Costa Rica.
Pero los planes de ir más lejos, comienzan de a poco a manifestarse. Checketts indicó que la aerolínea no descarta llegar por ejemplo a Brasil y Perú en un futuro próximo, más aún cuando la compañía recibirá comenzará a recibir parte de sus 30 A321, permitiendo liberar equipos hacia otros destinos o el lanzamiento de nuevos.
Con nuevas bases operacionales cada vez más al sur de los Estados Unidos y una flota que le permitirá operar sin problemas rutas de hasta siete horas de vuelo, JetBlue se encuentra cada vez más en posición para extender sus operaciones hacia Sudamérica. Esto sin mencionar en el potencial que tiene en Colombia, especialmente cuando este año entre en vigencia el acuerdo de cielos abiertos de este país con los Estados Unidos, lo que abrirá nuevas oportunidades. De esta forma, Colombia podría convertirse en la plataforma de JetBlue para Sudamérica, de la misma forma como lo es Perú y Colombia para LAN hacia Norteamérica.
Adicionalmente, Dave Berger, CEO de JetBlue, indicó el año pasado que la compañía está considerando aviones de mayor capacidad como el Airbus A350 o el Boeing 787, planes que de concretarse podrían traducirse en una operación de larga distancia dentro del continente, como por ejemplo vuelos sin escalas desde el cono sur a Nueva York.
La expansión de JetBlue hacia el sur intensificará la presencia de los modelos de bajo coste o híbridos en una región que hasta no hace mucho era ajena a este esquema de negocios en aviación. Sólo algunos países como Brasil y México han visto un desarrollo de este segmento, mientras que a nivel regional, LAN se ha caracterizado por impulsar un modelo híbrido en vuelos domésticos y algunos segmentos internacionales.
El crecimiento que se prevé para los próximos años a través de la llegada de nuevos operadores como JetBlue, acompañada de una futura expansión de otras aerolíneas como Spirit (E.E.U.U.) o Interjet (México), sumado al impulso de modelos híbridos en el transporte de pasajeros beneficiarán a un aumento del número de pasajeros, abriendo nuevas oportunidades para el sector.
Foto: Gastón Doval |
En los dos últimos años, la aerolínea con base en Nueva York-Kennedy ha duplicado sus operaciones en la región y su crecimiento en el mercado latino, responde a la capacidad de la aerolínea combinar una oferta y crecimiento equilibrado con un modelo de negocios que le ha permitido adaptar el modelo low cost para capturar un mayor tráfico Premium.
En 2012, un tercio de la red de la compañía estaba conformada por rutas desde/hacia América Latina y el Caribe, llegando incluso hasta Colombia, país que asumirá un rol clave en el siguiente paso que JetBlue de en la región. Sus últimas conquistas, fue de convertir a Puerto Rico en uno de sus principales mercados, relegando a operadores tradicionales como American Airlines. En ese sentido, el abandono por parte de esta última de la base en San Juan, entregará más herramientas para que JetBlue continúe creciendo. Durante el año pasado, la compañía incrementó en 2,8% la capacidad ofrecida medida en asientos disponibles por kilómetro.
De acuerdo a las declaraciones esgrimidas a Flightglobal por parte de John Checketts, director de planificación de rutas de JetBlue, la compañía espera crecer un 10% anual en 2013. Entre los nuevos destinos están por ahora las frecuencias desde Fort Lauderdale a Medellín, Colombia y a San José de Costa Rica.
Pero los planes de ir más lejos, comienzan de a poco a manifestarse. Checketts indicó que la aerolínea no descarta llegar por ejemplo a Brasil y Perú en un futuro próximo, más aún cuando la compañía recibirá comenzará a recibir parte de sus 30 A321, permitiendo liberar equipos hacia otros destinos o el lanzamiento de nuevos.
Con nuevas bases operacionales cada vez más al sur de los Estados Unidos y una flota que le permitirá operar sin problemas rutas de hasta siete horas de vuelo, JetBlue se encuentra cada vez más en posición para extender sus operaciones hacia Sudamérica. Esto sin mencionar en el potencial que tiene en Colombia, especialmente cuando este año entre en vigencia el acuerdo de cielos abiertos de este país con los Estados Unidos, lo que abrirá nuevas oportunidades. De esta forma, Colombia podría convertirse en la plataforma de JetBlue para Sudamérica, de la misma forma como lo es Perú y Colombia para LAN hacia Norteamérica.
Adicionalmente, Dave Berger, CEO de JetBlue, indicó el año pasado que la compañía está considerando aviones de mayor capacidad como el Airbus A350 o el Boeing 787, planes que de concretarse podrían traducirse en una operación de larga distancia dentro del continente, como por ejemplo vuelos sin escalas desde el cono sur a Nueva York.
La expansión de JetBlue hacia el sur intensificará la presencia de los modelos de bajo coste o híbridos en una región que hasta no hace mucho era ajena a este esquema de negocios en aviación. Sólo algunos países como Brasil y México han visto un desarrollo de este segmento, mientras que a nivel regional, LAN se ha caracterizado por impulsar un modelo híbrido en vuelos domésticos y algunos segmentos internacionales.
El crecimiento que se prevé para los próximos años a través de la llegada de nuevos operadores como JetBlue, acompañada de una futura expansión de otras aerolíneas como Spirit (E.E.U.U.) o Interjet (México), sumado al impulso de modelos híbridos en el transporte de pasajeros beneficiarán a un aumento del número de pasajeros, abriendo nuevas oportunidades para el sector.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario