martes, 6 de marzo de 2018

SKY reconocida nuevamente por la excelencia en la seguridad de sus operaciones: “La asociación entre low cost y calidad es fundamental”

Por Ricardo J. Delpiano

Sky A319 CC-AJF new colors taxiing (RD)
Foto: Ricardo J. Delpiano
Como reflejo del alto cumplimiento de los procedimientos y estándares internacionales aplicados, la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) entrega a SKY una nueva certificación IOSA (IATA Operational Safety Audit) que reconoce que la seguridad de todas las operaciones, así como la inversión de la compañía para ofrecer al cliente no sólo una seguridad permanente en todos sus vuelos sino que un producto consistente y a la medida, tal como se publicita.

“Siempre hemos afirmado que para nosotros la seguridad es intransable y recibir este reconocimiento por tercera vez consecutiva no sólo lo confirma, sino que reafirma aún más nuestro compromiso por otorgarle a cada uno de nuestros pasajeros los máximos estándares de seguridad”, comenta Holger Paulmann, CEO de SKY.

SKY es la única compañía de bajo costo y tarifas bajas de Chile, en estar incluida desde el 2014 en el registro IOSA. Para la empresa es uno de los principales reconocimientos que se han obtenido porque se trata de una evaluación y certificación estándar de la seguridad operacional con estándares iguales para todas las compañías aéreas del mundo.

La certificación IOSA evalúa todos los sistemas de gestión y control de seguridad y operaciones de una línea aérea, garantizando a sus pasajeros que ésta cumple con los más altos estándares y requisitos de la industria. Dentro de las áreas que se auditan se encuentran la organización, las operaciones de vuelo, las operaciones de cabina, el mantenimiento, despacho comercial, las operaciones terrestres, el transporte de carga y la seguridad operacional.

SKY destaca ser la primera LCC chilena en estar en el registro pero su logro trasciende las fronteras del país, ya que a fecha de hoy, es la única compañía aérea en su tipo con IOSA en el continente americano. Por tipo de línea aérea, las más cercanas son GOL en Brasil, e Interjet en México, ambas pertenecientes al segmento híbrido o intermedio entre LCC o legacy (tradicional). A nivel mundial, también son pocas las LCC incluidas en el registro de seguridad operacional. Air Arabia (Sharjah), flydubai (Dubái), Iberia Express (España), Mango (Sudáfrica) y Vueling (España), son algunas firmas incluidas según el listado publicado por IATA a la fecha.

“Somos una de las pocas LCC que lo tenemos (el registro IOSA) y por lo mismo, somos una aerolínea evaluada con 7 estrellas que es el máximo que una aerolínea puede tener”, indica Paulmann.

El máximo directivo de SKY sin duda celebra el paso exitoso de esta auditoría, logro que por cierto, trasmite a todo el equipo de la compañía, desde la gerencia de Operaciones hasta los empleados en rampa o quienes monitorean los vuelos, por la contribución que cada uno realiza. Según su visión, IOSA es y debe formar parte del todo que constituye la línea aérea y es un indicador que reafirma que ser LCC no debe estar asociado a mal servicio.

“El tema de la seguridad es importante. Para mi gusto, el sinónimo de low cost no es ni ordinario ni de mala calidad, sino todo lo contrario: es tener un modelo de excelencia operacional muy robusto que ofrezca lo mejor, entendiéndose esto en una alta tasa de cumplimiento de lo que tu le prometes al cliente”, puntualiza, indicando que eso debe manifestarse en un update del 100% de la información que se sube a la página web, pasando por los aspectos comerciales y el cumplimiento de la operación lo más perfecta y consistente posible.

Junto con la operación, el tema de la calidad de servicio es uno de los temas que siempre ha preocupado a SKY. Por lo mismo, es uno de los aspectos que se mantuvieron durante el proceso de transformación en una LCC, más allá del cobro de servicios complementarios como parte del modelo. Mantener esa consistencia y trasmitirla al cliente, a hecho que la fundación Pro Calidad la reconozca como la “Mejor Línea Aérea en Chile” en satisfacción de clientes por dos veces consecutivas.

“La asociación entre low cost y calidad es fundamental”, dice Paulmann. “Hay algunas compañías LCC que quizás mal entienden ese concepto y cavan tan profundo en los costos que la calidad se termina deteriorando. Soy un convencido de que el deterioro de la calidad implica un deterioro a largo plazo de la seguridad operacional. Por ejemplo, si no cumples el itinerario debes compensar al pasajero, si se te atrasa un vuelo en la mañana se te atrasan los vuelos en el día y generas mayor presión y toda una cadena que impacta en la operación. Si te esfuerzas por hacer un trabajo lo más ordenado posible terminas por tener una mejor calidad”.

Desafíos más inmediatos

Hablar de seguridad operacional, calidad y consistencia del servicio, obliga a realizar una evaluación a la situación actual de Chile, especialmente en lo que respecta a la saturación de infraestructura de aeropuertos considerando el crecimiento asimétrico de esta y de las líneas aéreas. La situación del aeropuerto de Santiago, particularmente, surge con el retraso de las respuestas por parte del Estado  y es el principal desafío a atender por ser la base principal de las compañías aéreas desde donde articulan la gran mayoría de sus operaciones en el país.

SKY A319 CC-AJF remoto (RD)
Foto: Ricardo J. Delpiano
“El problema no es sólo de infraestructura sino que tiene que ver con la gestión misma del aeropuerto”, sentencia el CEO de SKY, apuntando a una responsabilidad compartida de instituciones públicas y privadas que intervienen en la aviación chilena. “Nos pasa mucho que nuestros vuelos aterrizan y una vez que están fuera de la pista, recién le dicen donde tiene que dirigirse para estacionar el avión. Pasan 10 minutos para que le contesten que una posición está ocupada por un avión de la competencia que obliga a esperar o dirigirse a una posición remota, implicando que debes mover toda tu gente de tierra a otro sitio. Todo ese proceso hace que se genere un retraso en el sistema aeroportuario”.

Otro de los temas que preocupa a SKY es la inconsistencia en el sistema de equipaje que pese a los cambios que se han realizado todavía presenta demoras generando afecciones al pasajero. Para la primera LCC de Chile, la lenta solución de este tema radica en un tema de interés y voluntad, resumido en que ninguna de las partes responsables se ven afectadas significativamente. A su juicio la injerencia que organismos públicos tienen en la aviación debe reflejarse en un tema de responsabilidades, algo que a la fecha no ocurre.

“Creemos que debe haber un sistema que haga partícipe de las responsabilidades a la autoridad porque sino no se resuelve el problema. En dos años sólo se han hecho mejoras pequeñas”, comenta Paulmann.

Para avanzar en estos y otros temas, la posición es abierta al diálogo y presionar a todos los actores para avanzar hacia una mayor transparencia de la gestión para que las malas prácticas vayan desapareciendo o sean castigadas, de manera tal de no afectar a quienes si cumplen.

Desde Nuevo Pudahuel, comparte algunas de las visiones planteadas por SKY como por ejemplo que las líneas aéreas hagan su mayor y mejor esfuerzo en cumplir sus horarios establecidos, para que en conjunto toda la comunidad aeroportuaria pueda manejar eficientemente el alto flujo en horas punta, en un contexto donde el aeropuerto está alcanzando su límite de capacidad. “Es así como el terminal tiene un máximo de operaciones por hora, pero si una aerolínea no cumple con sus tiempos, afecta toda la funcionalidad del aeropuerto”, explican.

El concesionario comparte el objetivo de promover medidas que incentiven a los operadores a un mejor respeto de los horarios asignados y especifica que la situación actual es algo temporal hasta que la nueva infraestructura del aeropuerto que el concesionario construye, entregue el tan necesario espacio, no sólo para fortalecer a los nuevos operadores, pero también para ser eficaces en la atracción de nuevas aerolíneas y, en consecuencia, apertura de rutas nóveles, que benefician directamente al pasajero con mayor competitividad de precios.

Respecto a la cinta de equipaje, Nuevo Pudahuel puntualiza que cuando se comenzó con la operación del sistema hace poco más de año, se acordó con las autoridades revisarlo ya que no se ajustaba en la operación diaria a las características técnicas del proyecto que debía recibirse. Independiente de esta situación, agregan que mientras esas mejoras llegan, las aerolíneas aporten al correcto funcionamiento del mismo al momento de ingresar los equipajes a la cintas o retirarlas al final para llevarlas al avión, de manera tal que no impacte a todo el circuito. “Es así como la mayor preocupación de las aerolíneas y de Nuevo Pudahuel, nuestro pasajero, no se vea afectado por esta situación en curso de resolución”.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Discrepo del análisis del señor Paulmann porque la certificación IOSA de Sky lo que en realidad revela es que estamos frente a una compañía híbrida y no una low cost. Las compañías que no realizan esta auditoría tampoco son más riesgosas como se intenta señalar. Esta es una auditoría auspiciada por IATA y es completamente voluntaria y la decisión de las LLC ha sido históricamente que es innecesaria porque demanda esfuerzo, exige procesos que aumentan los costos operacionales y no constituye un real aporte para un negocio que normalmente no utiliza acuerdos de código compartido ni alianzas, donde sí es relevante tenerla. En consecuencia, felicitamos a Sky por esta certificación pero demuestra que estamos frente a una compańia híbrida, tal cual la califica el mercado en estos casos.