Aeropuerto de Santiago cede espacio al arte urbano: 52 artistas podrán crear y exponer sus obras en la puerta de entrada a Chile

Por Ricardo J. Delpiano

Foto: Miguel Cano Alva

Primero fueron los árboles, ahora otra nueva iniciativa se prepara para tomar posición en la puerta de entrada a Chile: el arte y en todas las expresiones que se puedan conocer. Al menos esa es la intención de Nuevo Pudahuel, sociedad concesionaria del aeropuerto de Santiago, que busca a partir del mes de junio, dar un espacio adicional a la cultura, especialmente a esa moderna propia de las grandes urbes, diversa y generalmente incomprendida o poco aceptada.

Más que sólo ceder espacios, la idea es ir un poco más allá. Es poder trasmitir en vivo y a través del arte, todo ese vínculo natural que existe entre el aeropuerto, la ciudad y por cierto, la comunidad, el cual no siempre es apreciado ni menos comprendido. Integración, viajes, desarrollo, unión, encuentro, respeto, tolerancia, apertura, cultura, países, son sólo algunos de los conceptos que día a día –y con cada vuelo que llega o sale- refuerzan el rol característico propio de los terminales aéreos y que buscan trasmitirse en estas expresiones artísticas que se colocarán en la entrada de Chile.

Serán 52 paneles que estarán dispuestos en la entrada sur del terminal aéreo los que estarán a disposición de artistas emergentes que representan a las 52 comunas de la Región Metropolitana (Santiago y sus alrededores) para que puedan crear o exhibir sus obras entre los días domingo 5, lunes 6 y martes 7 de junio a partir de las 10:00 horas. Cada panel está ubicado frente a los edificios de la faena y previamente tratado para que las obras no se vean afectadas por la intemperie.

La acción que Nuevo Pudahuel es única a nivel país, ya que ningún otro terminal aéreo en Chile sea estatal o concesionado, ha dado espacios para que manifestaciones artísticas distintas a las tradicionalmente aceptadas puedan ser exhibidas. El concesionario ofrecerá gratuitamente todos los elementos para que los artistas puedan trabajar libremente y con total comodidad: transporte desde la estación del metro “Las Rejas”, almuerzo, pinturas acrílicas y baños.

Siguiendo un principio fundamental, cada obra mantendrá los derechos de autor de su creador y serán ellos, los que decidan de qué modo su obra será expuesta. Una propuesta inicial, será que estos estén disponibles para el público en los accesos del aeropuerto por el periodo de un año, para luego ser cuidadas en el interior del terminal y vuelan a lucirse en el año 2020 cuando Nuevo Pudahuel entregue las obras del nuevo edificio de pasajeros.

Como el arte y la aviación están abierto a todos, la iniciativa que el aeropuerto de Santiago también busca ese propósito. Siguiendo un principio de asociación y colaboración con los distintos actores de la industria, esta acción es llevada a cabo en cooperación con la Asociación Chilena de Municipalidades, entidad encargada de reunir a los artistas, y se unirá también Sky, aerolínea que con su nuevo modelo de negocios busca democratizar aún más los viajes en Chile. Sky proveerá de dos pasajes a un destino de elección dentro de Chile a la persona cuya obra obtenga más “likes” o “me gusta” en la cuenta de Instagram del aeropuerto.

Paralelamente a esta acción, la artista nacional Renate Neumann ha donado un mural en la cara sur de uno de los edificios de faena. Actualmente está trabajando en la obra y será́ entregada al comienzo de la actividad cultural con las municipalidades y los artistas emergentes.

Además de construir el nuevo terminal de pasajeros y de aportar al mejoramiento de la conectividad aérea de Chile, incentivando que nuevas aerolínea operen en Santiago, Nuevo Pudahuel busca hacer que el aeropuerto sea también un espacio abierto y agradable para todos. Un lugar donde la experiencia sea algo grato no sólo en lo referente a los procesos de viaje –que deben ser rápidos y menos intimidantes para el usuario- sino que también sean agradables en distintos ámbitos como lo visual y lo estético.

El concepto que se quiere aplicar propio de los terminales aéreos modernos, aquellos de cuarta generación en los que un aeropuerto es más que un lugar de embarque o desembarque de pasajeros en un avión mezclado con un centro de comercio, es un lugar donde la gente va porque quiere. Luis Vidal, uno de los arquitectos del mundo y que colabora en el diseño del nuevo aeropuerto de Santiago, lo explica en palabras simples: “Es un edificio que es un destino, al que la gente quiere ir y no de una manera forzada, sino libremente. ¿Por qué? Simplemente porque va a tener la mejor oferta y donde va poder apreciar realmente la libertad”.

El arte y otras futuras acciones que se vienen con la comunidad aeronáutica y no aeronáutica, son sólo algunos primeros que se comienzan a dar en Santiago, para que la capital de Chile pueda ponerse “al día” en temas de experiencias, además de la tan necesaria infraestructura.