Líneas aéreas mejoraron su puntualidad en el aeropuerto de Santiago durante el 1er trimestre 2015

Por Ricardo J. Delpiano

Foto: Ricardo J. Delpiano

Las líneas aéreas que operan regularmente en el aeropuerto Arturo Merino Benítez de Santiago registraron un incremento de 1,7 puntos porcentuales en los indicadores de puntualidad, con base en la información publicada por la Junta Aeronáutica Civil (JAC) para el primer trimestre de 2015.

Entre enero y marzo de 2015, la puntualidad de todas las líneas aéreas alcanzó al 84,4% en comparación con el 82,7% registrado en el mismo periodo del año anterior. La regularidad de los vuelos se mantuvo sin cambios con un cumplimiento del 99,7% de las operaciones programadas.

Los resultados preliminares reflejan parte del compromiso de las líneas aéreas por garantizar una óptima calidad de servicio a sus pasajeros y clientes, además de las inversiones realizadas por estas en materia de renovación y gestión de flota, capacitación de su personal, mejor atención en los aeropuertos y en los canales de información a los usuarios en caso de contingencias.

De igual manera, destaca las mejoras realizadas por el propio aeropuerto para adecuar la capacidad de la actual infraestructura y la mejor coordinación en los horarios de salida, la utilización de los puentes de embarque y el manejo de contingencias. Cabe recordar que durante el segundo semestre de 2014, se puso en marcha el Airport Collaborative Decision Making (ACDM) instancia en la cual las líneas aéreas, la Autoridad Aérea (DGAC), el administrador del terminal (SCL Terminal Aéreo S.A.), los servicios públicos y todos los operadores, toman decisiones en completa coordinación permitiendo, por ejemplo, evitar o mitigar situaciones adversas.

En el primer trimestre, Air Europa fue la línea aérea con la mejor puntualidad (100,0%) aunque fue la que menos vuelos realizó (sólo 18 operaciones entre enero y marzo). En segundo lugar, se ubicó Copa Airlines con un 97,0% de vuelos a tiempo, seguida de Aeroméxico con 93,7% y Sky Airline con 92,8%.

Fuente: JAC

Considerando sólo las aerolíneas internacionales, todas a excepción de Aerolíneas Argentinas, Austral, Air Canada y Qantas, obtuvieron una puntualidad superior al 80,0%. Air Europa, Copa Airlines, Aeroméxico, Sky Airline, GOL y American Airlines, fueron las compañías que tuvieron sobre el 90,0% de vuelos a tiempo.

Entre las líneas aéreas chilenas, incluyendo sus operacionales nacionales e internacionales, Sky Airline obtuvo la mayor puntualidad (92,8%) seguida de LAN –incluyendo sus filiales- con una puntualidad de 83,8%. Las otras compañías chilenas por realizar vuelos no regulares en el aeropuerto de Santiago no son incluidas en la medición. En el primer trimestre, LAN registró un total de 9.778 despegues desde el aeropuerto de Santiago, siendo la aerolínea con mayor cantidad de operaciones. Sky Airline por su parte tuvo en el mismo periodo sólo 2.923 salidas.

Respecto a la regularidad de las compañías nacionales, tanto LAN como Sky Airline registraron un cumplimiento casi perfecto de los vuelos (sobre el 99,0%). A fines de marzo, la contingencia provocada por los aluviones y el corte de fibra óptica que afectó a algunos aeropuertos del norte del país obligó a suspender o reprogramar algunos vuelos, lo que puede explicar que las compañías no hayan registrado una regularidad total de sus operaciones saliendo desde la capital.

Dentro de los estándares de la industria, una operación es considerada puntual cuando sale o arriba dentro de los 15 minutos indicados en la salida de itinerario. La salida de un vuelo está determinada por la hora de cierre de puertas. Se suele considerar como óptimo una puntualidad promedio que se ubica en un 80,0% o superior.

Las regularidades y puntualidades informadas por la JAC no distinguen causas y si éstas son o no atribuibles a las compañías aéreas. Entre las razones que pueden afectar los indicadores están problemas relacionados con la meteorología, con la infraestructura del aeropuerto, demoras por tráfico aéreo o problemas operativos en las aerolíneas, en cuanto al despacho, mantenimiento o atrasos en la programación de aeronave como consecuencia del retraso de otro vuelo.