Consorcio Nuevo Pudahuel es ratificado por la Contraloría para administrar el Aeropuerto de Santiago

Por Ricardo J. Delpiano

Foto: Alejandro Ruiz

Mediante Decreto Supremo publicado en el Diario Oficial, Chile otorgó la adjudicación de la concesión del aeropuerto Arturo Merino Benítez de Santiago al consorcio Nuevo Pudahuel, el cual a partir de octubre tendrá la misión de administrar el principal terminal aéreo del país por un periodo de 20 años.

La nueva concesión comenzará a partir del 1° de octubre de 2015 y reemplazará a la actual a cargo de SCL Terminal Aéreo S.A.

Para Nuevo Pudahuel, la publicación del Decreto Supremo ratifica el cierre del proceso de licitación que se hizo público el 4 de febrero de este año cuando las empresas participantes hicieron entrega de las propuestas económicas una vez revisados y aprobados los documentos técnicos.

El consorcio obtuvo una calificación de 4,9 en una escala de 1,0 a 7,0 en sus propuesta técnica y ofreció al Estado de Chile una propuesta del 77,56% del total de los ingresos totales que registre, alrededor de diez puntos porcentuales por sobre el resto de los competidores más inmediatos. Las Bases de Licitación (BALIS) estipulan que la oferta económica que los participantes debían hacer para el Estado sería superior al 60% de total de los ingresos generados en el área de concesión.

Entre las responsabilidades de Nuevo Pudahuel en el aeropuerto de Santiago están:

• La renovación de las actuales instalaciones, incluyendo la restauración y ampliación del terminal existente para destinarlo exclusivamente a vuelos nacionales con una superficie de 110.000 m2 con una ampliación de 9.000 m2. 
• Diseño, financiamiento y construcción de un nuevo terminal de 175.000 m2, aumentando la capacidad para recibir 30 millones de pasajeros por año. 
• Operación aeroportuaria durante todo el plazo de concesión (20 años), incluyendo el actual terminal y próximo terminal que se construirá, así como estacionamientos y futuros desarrollos inmobiliarios.

Uno de los objetivos planteados por Nuevo Pudahuel es convertir a Santiago en un verdadero centro de conexiones, principalmente de carácter intercontinental, labor que hasta la fecha ha sido realizada principalmente por las compañías aéreas. En esa visión se indica que el potencial de crecimiento que tiene el aeropuerto -junto con la creación de nuevas rutas-, es transformarse en un puente que una Sudamérica con Europa, Estados Unidos y Asia.

El consorcio está integrado por Aéroports de Paris (45%), Vinci Airports (40%) y Astaldi (15%). La empresa comenzará a  implementar la fase de diseño para comenzar después con la operación del aeropuerto. Tanto el diseño como los trabajos de construcción estarán a cargo de Vinci Construction Grands Projets y Astaldi, cada uno con el 50% de las obras a realizar.

Tanto Aéroports de Paris como Vinci Airports cuentan con amplia experiencia y trayectoria en el desarrollo y gestión de plataformas aeroportuarias en el mundo. Las dos firmas operan 60 aeropuertos en el mundo, incluyendo hubs como los de París Charles De Gaulle y Orly o Atatürk de Estambul, este último a través de una participación en el operador turco TAV. El trabajo que estas firmas han venido realizado en distintos países del mundo puede ser considerado como clave para el desarrollo futuro del aeropuerto Arturo Merino Benítez para convertirlo en un hub eficiente con una visión de futuro.