United reduce presencia en Argentina mientras espera reubicar parte de su flota de largo alcance

Por Ricardo J. Delpiano

A partir del próximo 29 de septiembre, United abandonará la ruta Newark – Buenos Aires, reduciendo de esta forma su presencia en Argentina, la que sólo se centrará en el vuelo diario desde Houston (IAH). 

"United ha cuidadosamente considerado la viabilidad de la ruta Buenos Aires/Nueva York y llegó a la conclusión de que no hay suficiente demanda en el mercado para sostener el servicio sin escalas", indicó la compañía ante la consulta de medios argentinos. “La aerolínea continuará operando su servicio diario sin escalas entre Buenos Aires y su centro de distribución en Houston, el aeropuerto Intercontinental George Bush", se precisó.

 United se encuentra todavía reorganizando la flota combinada antes de anunciar nuevos destinos. Foto: United

Parte de la baja del tráfico estaría asociado al descenso del segmento corporativo como consecuencia del sentimiento de desinversión en Argentina, aspecto que también se ha manifestado en otros operadores en el vecino país. Prensa argentina, agregó también como posible causa el cepo cambiario instaurado por el Gobierno de Cristina Fernández. Sin embargo, esto último no ha sido comprobado en su totalidad, siendo más una especulación de los medios más que la razón principal del cese de la ruta.

Otros factores que contribuyen guardan relación con una debilitada la economía estadounidense la cual ha resentido el flujo de pasajeros y la incapacidad de la propia aerolínea para explotar adecuadamente la ruta.

United comenzó a operar la ruta Newark – Buenos Aires tras su fusión con Continental, como un traslado del servicio desde Washington Dulles ocurrido en abril de 2012. Dicha ruta fue establecida tras la crisis argentina en 2001 y fue uno de los pocos servicios que la compañía mantuvo en América Latina, luego del cierre de la base en Miami.

Con la operación combinada, la aerolínea estadounidense esperaba asegurar su cobertura desde Newark y Houston (IAH), dos de sus principales hubs. Sin embargo, Newark nunca supo conseguir el atractivo necesario en el pasajero argentino, el cual está asociado más al tráfico V.F.R. que al de negocios. En ese caso, se agrega como componente la preferencia de muchos viajeros por llegar a Nueva York a través del aeropuerto John F. Kennedy en lugar que a Newark, lo que también habría influido en algo en los resultados. Bajo esa perspectiva, se entiende en parte los éxitos de American Airlines en los servicios a ciudad y de otras aerolíneas como LAN o TAM, a través de sus respectivos centros de distribución.

Dentro de la industria se señalan también algunas omisiones que habría hecho la aerolínea en el hub de New Jersey, como descuidar el tráfico Premium que la antigua United dejó en parte de lago en pos de la fusión con Continental. Ahora, la compañía se encuentra trabajando para recuperar mercado en dicho segmento en la medida, tarea no sencilla ante la llegada de nuevos operadores a Newark.

Además de Buenos Aires, United también dará de baja los servicios desde Newark a Estambul junto a otras rutas internacionales desde distintos puntos de los Estados Unidos, como consecuencia de una reorganización de la flota y su ubicación en otros destinos de mayor rentabilidad.

Por ahora, especulaciones sugieren que la compañía podría utilizar algunos de los Boeing 767-300ER y B777-200ER que estarían disponibles en nuevos destinos en Asia o Sudamérica. Como algunas alternativas posibles se mencionan un mayor número de frecuencias a ciudades en Brasil o concretar el retorno a Santiago. En el caso de Chile, la posible inclusión del país en el programa de exención de visas de Estados Unidos (Visa Waiver Program) y la mejor situación de la economía chilena podría tener un efecto catalizador en el tráfico entre Chile y Norteamérica.

Santiago es el gran vacío en la red sudamericana de United. Es el único de los grandes mercados de la región no atendido directamente con la compañía. En 2011, la directora de la compañía para el cono sur americano señaló que cuando termine la reorganización de las operaciones y de la flota combinada se debería retomar la operación hacia Chile. En ese posible regreso, surge como candidata la ruta Houston – Santiago, en servicio en el cual United tendría mayores probabilidades de tener éxito dado el potencial de conexiones.

Por el momento, no se esperan nuevos destinos de larga distancia dentro de la región, debido a que la compañía todavía no termina de reorganizar la flota combinada. En marzo de este año, Rolf Meyer, director regional de United para México y la región andina, señaló a la revista América Economía Perú que a fines de 2013 se tiene previsto terminar con ese proceso. Por lo anterior, no está descartada la ampliación de la red actual en América Latina.

Durante este año, la reorganización de la flota tuvo un duro revés como consecuencia de la paralización de la flota B787 que obligó a la compañía a retrasar planes de expansión debido a la falta de aviones. Con los Dreamliner de vuelta en servicio y de no haber nuevas complicaciones con este avión, más la llegada de nuevos equipos, United podría cumplir sus objetivos dentro de un plazo prudente y continuar con su plan de expansión.