Alitalia: sus razones y desafíos en la reanudación de vuelos a Santiago

Por Ricardo J. Delpiano

Foto: Ricardo J. Delpiano

El miércoles, Gabriele Del Torchio, CEO de Alitalia, presentó el Plan Industrial 2013-2016, en el cual se mostró la carta de navegación de la principal compañía aérea italiana para los próximos tres años. Este nuevo plan estará enfocado en desarrollar el hub de Roma-Fiumicino, potenciar los destinos internacionales e inaugurar nuevas rutas, como por ejemplo Santiago de Chile.

De acuerdo a lo señalado, Alitalia contempla estableció el retorno de sus operaciones a Santiago para mediados de 2015 –probablemente en el mes de octubre-, con una frecuencia inicial de tres vuelos por semana, atendidos con vuelos sin escalas desde Roma con aviones Boeing 777-200ER.

Para la aerolínea, cuatro son las razones para considerar a Santiago como nuevo destino: un alto volumen de tráfico Premium, alto yield, escasa competencia de aerolíneas entre Chile y Europa, con ausencia de competidores en rutas punto a punto en el caso de Italia y una variable identificada por la compañía como “ventaja geográfica”.

Como consecuencia del crecimiento económico, la seguridad que ofrece el país en materia institucional-económica y los ambiciosos planes que están en desarrollo, el tráfico Premium se ha visto incrementado en Chile lo que favorece a muchas aerolíneas que centran en este segmento la fuente principal de negocio. Este crecimiento es el que por ejemplo impulsó en parte el retorno de Qantas, el aumento de frecuencias de Air France (con buenos niveles de ocupación en sus clases nobles) y la mayor capacidad que Air Canada ofreció en los últimos meses.

Alitalia identifica la ruta a Santiago con un “buen yield”, con un valor de 6,7. Cabe recordar que por yield es un indicador que busca evaluar cuanto logra la aerolínea facturar por cada kilometro que vuela un pasajero.

La escasa competencia en las rutas Chile-Europa y la ausencia de competidores punto a punto en el caso de Italia, es otro de los elementos que la aerolínea señala como un generador de oportunidades para retomar la ruta a Santiago. Actualmente, sólo tres compañías atienden el tráfico Chile-Europa con un servicio sin escalas: Air France, convertida hoy en la líder de la ruta, Iberia y LAN. El resto de la oferta se distribuye entre las distintas compañías sudamericanas o europeas que canalizan tráfico vía otros hubs en la región como Buenos Aires o Sao Paulo, por ejemplo.

En el caso punto a punto, Chile no ha tenido un enlace aéreo con Italia, desde la salida del mercado de Alitalia a fines de la década de 1990. La mayor parte del tráfico desde/hacia Italia se canaliza a través de otros hubs europeos que poseen un enlace directo con Santiago, como por ejemplo Madrid o París – Charles De Gaulle o bien, vía los centros de distribución sudamericanos como Buenos Aires-Ezeiza o Sao Paulo-Guarulhos. Cabe recordar que las únicas compañías sudamericanas que atienden Italia son Aerolíneas Argentinas (Buenos Aires-Roma) y TAM (Sao Paulo-Milán).

Finalmente, Alitalia añade una variable denominada “ventaja geográfica”, asociado a una determinada cantidad de flujo de pasajeros con Italia o que pueden utilizar Italia para llegar a su destino final. En esa línea, la compañía identifica tres flujos: Europa/Europa Oriental – Sudamérica, Europa del Norte – África y Europa Occidental – Medio Oriente. También dentro de esta variable se inserta el tráfico étnico asociado a las comunidades italianas residentes en distintos países, con Argentina y Brasil, como los países con mayor cantidad de comunidades italianas.

Dentro de la “ventaja geográfica” se identifica también el crecimiento del tráfico turístico como un componente catalizador de las nuevas operaciones de la compañía.

Santiago será el único nuevo destino que Alitalia planea abrir en América Latina de aquí al 2016 como parte de su plan de expansión. Paralelamente, la compañía ha señalado un fortalecimiento de su red, potenciando las alianzas con compañías estratégicas como Air France y Delta en el caso de Norteamérica, Etihad Airways en Medio Oriente y GOL en Brasil.

En su nueva ruta a Santiago, Alitalia tendrá el desafío de asegurar un volumen de tráfico de pasajeros rentable, ya sea en el segmento punto a punto como en el tráfico de conexión. Esto último constituye un reto importante, considerando que el potencial de conexiones desde Chile hacia Europa Oriental o Medio Oriente es limitado.

Adicionalmente, los planes de Alitalia para Santiago deberán armonizarse con la actividad que hoy realiza Air France, compañía que hoy lidera el tráfico entre Europa y Chile, además de poseer un tráfico importante de conexión hacia otros puntos, cuya red internacional es significativamente superior a la compañía italiana.

Conscientes de esta situación, Alitalia planea fortalecer sus rutas con un aumento de frecuencias y mayor cantidad de destinos como por ejemplo Seúl, ciudad que se abrirá al mismo tiempo que Santiago. La oferta de destinos clave en Asia, como China, Japón o Corea del Sur, pueden constituir en ese sentido un elemento interesante que la compañía podría explotar y que para el pasajero desde Chile podría considerar como alternativa a la actual oferta disponible.

Otro desafío a considerar, está que otros operadores aéreos confirmen su intención de volar a Santiago, con British Airways como principal candidato. El posible ingreso de la aerolínea británica vendría a reforzar la conectividad entre Chile, Europa y el resto del mundo, fortaleciendo la red de Oneworld con enlaces directos o sin escalas de dos importantes hubs de la alianza (Londres-Heathrow y Santiago). Al igual que en el caso de Air France, el ingreso de British Airways representará un reto importante por la mayor red que posee y por la relación mayor que se establecería con LAN.

Desde el punto de vista operativo, la ruta a Santiago demandará una utilización de más de 30 horas de un avión, lo que implica casi la dedicación exclusiva de un aparato para la ruta, lo que exigirá a la compañía retos importantes para garantizar la rentabilidad de la operación, algo no menor considerando la capacidad del B777-200ER.