Avanza la producción del B787s: primeros ejemplares para LAN desde agosto

Por Ricardo J. Delpiano

Con ocho aviones entregados a dos compañías aéreas (ANA y JAL Japan Airlines), el Boeing 787-8 Dreamliner cumple sus primeros seis meses de servicio comercial, marcado por un periodo clave entre la modificación de los primeros modelos -tras los inconvenientes reportados en los meses anteriores y la normalización del programa de entregas.

Bajo este escenario, el director ejecutivo de Boeing, Jim McNerney señaló esta semana que los costos unitarios de construir un B787 se verán reducidos en un 50% a menos de un año de haber entregado el primer ejemplar a una línea aérea. A pesar de que el fabricante norteamericano todavía se encuentra trabajando en la modificación de los Dreamliners construidos, la reducción a la mitad de los costos de producción coincidirá con la construcción del primer ejemplar que no tendrá la necesidad de incorporar cambios en la estructura, cableado, sistemas e interiores.

Primer Boeing 787-8 de LAN Airlines (ZA534, l/n10) estacionado en Everett. Foto: Claudio E. González

Al detallar los avances del proceso durante la divulgación de los resultados financieros de Boeing para el primer trimestre 2012, McNermey aseguró que los cambios en ingeniería descubiertos en las pruebas de vuelo se han reducido significativamente, con lo cual esperan que al menos 35 de 43 B787s construidos cuenten para fines de año con los cambios requeridos.

El punto de inflexión de este proceso, lo constituirá la construcción del avión n°66, ya que será el primer ejemplar en salir de la cadena de producción con los cambios incorporados permitiendo reducir el costo de producción estimado en US$ 186 millones, ligeramente inferior a la lista de precios de catálogo de US$ 193.5 millones. Sin embargo, para Boeing esto no significará en un descenso en el punto de equilibrio de toda la producción del Dreamliner, desde la perspectiva del costo unitario, el cual se estima que se alcanzará recién hacia 2020 cuando existan más de 1.100 unidades.

Por el momento, la información dada a conocer esta semana permiten entregar señales positivas a todo el programa B787 Dreamliner, el cual se ha visto retrasado en reiteradas oportunidad obligando a las aerolíneas a demorar sus planes de crecimiento o adoptar políticas de contingencias hasta la incorporación de sus respectivos pedidos. Las novedades, fueron dadas a conocer casi en paralelo con la salida del primer B787-8 de la cadena de montaje de Charleston en Carolina del Sur, ejemplar que será entregado a Air India en junio próximo. Asimismo, los cambios introducidos permitirán a Boeing avanzar también en la construcción de la versión B787-9, modelo que espera completar en 2013 y entregar en 2014 con Air New Zealand como primer operador.

Con la paulatina normalización de la producción y sin mayores novedades a la fecha, Boeing confía en tener las condiciones para asegurar una normalización de las entregas. Para ello planea acelerar la cadena de producción de 3.5 B787 por mes a cinco para fines de año. A la fecha, sólo ANA –All Nippon Airways- y JAL Japan Airlines son los únicos operadores del Dreamliner. Otras aerolíneas que esperan recibir sus primeros B787s son United Airlines, Air India, Ethiopian Airlines, China Southern y LAN Airlines.

Close up desde el exterior donde se aprecia con mayor detalle el primer B787 Dreamliner de LAN enteramente cubierto. Foto: Claudio E. González. 

De acuerdo a lo anunciado por la propia compañía, LAN incorporará sus dos primeras unidades durante el segundo semestre de este año, los cuales podrían ser entregados en los meses de agosto y octubre de este año, según información de prensa divulgada tras la Junta de Accionistas de la empresa celebrada el día de ayer. Estos dos aviones corresponderían a los ejemplares ZA534 y ZA535, n°10 y n°16 en la línea de ensamblaje respectivamente. De acuerdo al plan de flota, LAN espera recibir otros tres B787s en 2013 y siete en 2014. Estos aviones operaran gradualmente en Santiago, Buenos Aires, Lima, Los Ángeles, Madrid y Frankfurt, reemplazando gradualmente a los B767-300ER en aquellas rutas que obligan a sacrificar carga de pago para garantizar el alcance necesario de la aeronave.