Por Ricardo J. Delpiano
La política aerocomercial argentina y la forma como ésta se articula en función de los intereses de la actual administración vuelve a estar en el centro del debate. La razón, es la decisión judicial que el pasado jueves determinó la revocación del permiso temporal que LAN había obtenido hasta el 16 de noviembre próximo para operar la ruta Lima-Rosario, poniendo fin a casi cuatro meses de incertidumbre.
La sentencia tiene condicionada la operación, cuyo término significaría el segundo fin de la presencia de LAN en Rosario. El primero de ellos ocurrió hace un parte de años, cuando por razones comerciales, la compañía nacional suspendió los vuelos a Rosario, operación que se realizaba como una extensión del vuelo Santiago-Córdoba y que más tarde se complementó con un vuelo sin escalas, también desde Santiago.
LAN ve amenazada su operación a Rosario, tras la decisión de la justicia argentina de revocar el permiso de operación a LAN Perú. Foto: Alejandro Ruiz
Tras el fin de esas operaciones, LAN resolvió volver a aterrizar en Rosario, esta vez con una estrategia más funcional y gestionada a través del reforzamiento que la compañía decidió dar al HUB de Lima desde el año pasado, inaugurando así cinco vuelos semanales Lima-Rosario-Lima, todos operados con Airbus A319. La nueva ruta permitía a los rosarinos acceder en forma más directa a distintas ciudades del continente, ofreciendo una conectividad única que históricamente Rosario no había tenido, pues sus enlaces aéreos siempre se han desarrollado en torno a países vecinos (Brasil, Chile, Uruguay).
Según indica el diario La Capital, para concretar este vuelo, en junio de 2010, LAN solicitó a la Administración Nacional de Aviación Civil de Argentina (ANAC) los permisos para operar la ruta, recibiendo sólo una autorización de carácter “exploratorio” por 180 días fijado por el Acuerdo de Fortaleza, el cual después se extendió hasta agosto pasado. Un mes antes, los rumores de que la ANAC no renovaría los permisos a LAN Perú, llevaron a la autoridades de la ciudad a realizar un fuerte lobby para impedir la suspensión de los vuelos de LAN y conseguir de la aprobación definitiva y de carácter regular de la ruta.
Así, autoridades del aeropuerto Malvinas Argentinas (Rosario) están intentando negociar directamente con la ANAC, mientras que el intendente Miguel Lifschitz ha anunciado que quiere tratar el tema en forma más seria, reuniéndose con la propia Cristina Fernández de Kirchner. Hasta el apoyo del gobernador provincial Hermes Binner se ha puesto firme, lamentando la situación, la que ha calificado de “un final anunciado”.
La campaña tomó fuerza en los últimos meses ya que Rosario no aceptaba volver a perder la más importante conectividad internacional, especialmente cuando hace un tiempo vio cerrada la posibilidad de que la panameña COPA Airlines operara en la ciudad, por no recibir nunca la autorización respectiva y, por posibles “complicaciones” con los vuelos de la uruguaya BQB y GOL.
El 6 de octubre la jueza federal Sylvia Aramberi concedió la autorización para que LAN Perú siga volando a Rosario hasta el 16 de noviembre próximo, pero una apelación planteada por la ANAC determinó que la justicia argentina revocara la medida, por lo que LAN debe suspender sus vuelos a Rosario.
En su edición del viernes pasado (04/11/2011), el diario La Capital señaló que el conflicto tomó ya un carácter internacional, con la inquietud exteriorizada por el gobierno peruano a través del consulado en Rosario por la situación de los vuelos de LAN, los cuales estaban “en sintonía” con las preocupaciones de la ciudad y provincia por el fin de la operación, aludiendo además a “intereses políticos”.
Con el fin de aminorar los ánimos en esa provincia, la administración de Cristina Fernández ha respondido ofreciendo un vuelo de la estatal Aerolíneas Argentinas hacia Ezeiza (además del vuelo hacia Aeroparque) con el fin de asegurar los enlaces internacionales que se perderían por la salida de LAN Perú de Rosario.
Sin que exista fundamento alguno, la respuesta entregada por el Gobierno de la Nación viene en cierta forma a reafirmar la tesis de que el fin de la operación de LAN Perú esté justificada por motivos políticos, enfocados principalmente por la protección que la administración Kirchner da a una de sus herramientas: Aerolíneas Argentinas.
Más allá de la molestia, la situación generada no debiera causar sorpresa alguna, especialmente cuando ya en oportunidades anteriores la administración de Cristina Fernández ha intervenido en distintas forma a favor de Aerolíneas Argentinas, episodios que le han costado más de algún conflicto diplomático. Uno de los últimos y más mediáticos ocurrió en 2010 con la internacionalización de Aeroparque, cuando sólo Aerolíneas Argentinas recibió los permisos para operar vuelos al exterior desde Aeroparque, medida que afectaba la libre competencia y que sólo pudo ser solucionado tras la presión diplomática principalmente de Brasil y Chile, autorizándose al resto de las aerolíneas operar también en dicho aeropuerto, aunque varios meses después.
Por el momento, los vuelos de LAN Perú continúan operando en forma normal dado que la empresa no ha recibido todavía la notificación, mientras el apoyo a la continuidad de vuelos continúa aumentando a través de algunos senadores, el cual se ha sumado a las peticiones de Rosario, de la Provincia de Santa Fe.
En un escenario todavía incierto para esta ruta, hay muchos que dan por perdida la conectividad internacional de Rosario, la cual no podrá ser recuperada pues actualmente Aerolíneas Argentinas no cuenta con la capacidad para ofrecer la conexión internacional que hace LAN. Ni siquiera la futura entrada de Aerolíneas a Skyteam podría contribuir a ello. De suspenderse definitivamente la operación, una solución más inmediata podría ser la puesta en marcha de la ruta Rosario-Lima a través de LAN Argentina. Sin embargo ello obligaría a LAN a asumir costos por concepto de traslado de material de vuelo desde Buenos Aires a Rosario, que quizás podría justificarse si se logra rentabilizar de alguna forma dicho tramo.
7 comentarios:
Impresentable la actitud del gobierno argentino, que manera más retrógrada y sesgada de abordar la aeronavegación comercial.
Lamentablemente ya es una práctica habitual.
Pregunta, en base a esto, sería posible nuevamente un vuelo SCL-COR-ROS? o non-stop incluso.
Me alegro que Lan salga perudicada, espero algún dia abandone Chile, ya que le hace muy mal a nuestro pais, y se instale en su adorado Peru
Veo dificil un vuelo SCL-COR-ROS, principalmente dado que LA no tiene los permisos para mover tráfico en el segmento COR-ROS-COR.
Un SCL-ROS nonstop podría ser una alternativa aunque va a depender si los derechos que tenía LA todavía están vigentes o no y si la cantidad de pasaje justifique un vuelo hacia Santiago.
Sin embargo la ventaja que tiene el HUB de Lima (por tráfico de conexiones) dificilmente podrá ser reemplazada, dado la mayor oferta que LAN tiene desde esa ciudad.
Ricardo, en alguna web argentina leí que el Acuerdo de Fortaleza habría sido violado por Lan Perú, ya que el mismo busca la conexión entre los países signatarios del mismo (turismo entre Perú y Argentina, por ejemplo) y lo que hacía Lan Perú era utilizar el hub de Lima para conectar a los rosarinos con sus destinos en el norte de Sudamérica, Caribe y Estados Unidos. ¿Es así? Me consta que muy pocos peruanos utilizaban la ruta a Rosario: eran básicamente argentinos los que venían a Lima en conexión a otros países.
Lamentable comentario del anónimo de las 15:29.
Entonces, bajo el comentario de Jorge acerca del Acuerdo de Fortaleza... a LAN también deberían suspenderle la ruta COR-LIM... porque en el fondo esa ruta es para conectar desde LIM con el resto de la red de LAN.
Saludos!
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