Nuevos asientos optimizan la capacidad de aviones

Por Ricardo J. Delpiano

Un mundo cada vez más cambiante y expuesto a nuevas amenazas está obligando a la aviación comercial a adaptarse y buscar fórmulas que le permitan asegurar los ingresos y su crecimiento hacia el futuro. En función de aquello, a lo largo de la última década las aerolíneas han llevado distintos programas que permitan aprovechar mejor sus recursos y reduciendo los cada vez mayores costes que enfrentan. Uno de ellos -y quizás el más visible-, ha sido la renovación de flotas por aviones de última generación, cuya tecnología entrega importantes beneficios a las compañías aéreas. Mayor capacidad de payload, nuevos sistemas de navegación, aviones más silenciosos y menor consumo de combustible son sólo algunos ejemplos que favorecen hacia una optimización de las operaciones diarias.

Sin embargo no son los únicos. Asociado a lo anterior también encontramos la reconfiguración interiores de las cabinas, en las cuales los nuevos materiales en los overheads bins y asientos, el diseño de la misma, ayudan a optimizar los espacios permitiendo transportar más pasajeros en los mismos aviones. Y aunque esto sea una realidad, no siempre esto se traduce en vuelos más incómodos. Como ejemplos se pueden considerar las cabinas de Air France, Avianca, Jet Blue, Lufthansa, Qatar Airways o incluso la propia LAN, entre muchas otras.

Nuevos asientos en Clase Económica en los A32S de LAN, en este caso  en el CC-BAN, el más reciente Airbus A320 de la compañía. Foto: Pablo Olea

Asientos más delgados y ergonométricos, con mayor reclinación, de material más resistente permiten dar un mejor uso de la cabina, entregando herramientas a las aerolíneas para aumentar la capacidad de sus vuelos de manera más competitiva sin mermar en la comodidad para el pasajero, pues el espacio adicional generado permite incrementar la zona de descanso para las piernas o aumentar la reclinación del asiento, contribuyendo a mejorar la experiencia en vuelo.

Con la introducción la semana pasada del CC-BAN, el nuevo Airbus A320 de LAN, la compañía se ha sumado a la tendencia mundial instalando una nueva generación de asientos en su flota de corto-medio alcance, permitiendo incrementar la capacidad ofrecida pasando a ofrecer una nueva configuración de 174 asientos en lugar de las 168 plazas que se ofrecen en el resto de aviones de este modelo.

Las nuevas butacas cuentan con apoya cabezas y los mismos servicios que la compañía ofrece, agregando además una especie de cajón en el extremo superior del mismo además del clásico bolsillo inferior dispuesto para el safety card y las revistas a bordo.

Es de esperar que estas nuevas butacas comiencen a ser instaladas en el resto de la flota de corto alcance, A319, A320 y en el futuro A321, permitiendo ofrecer más asientos en toda la red sudamericana, sin la necesidad de recurrir a aviones adicionales para incrementar capacidad.

En este aspecto, la inversión de LAN puede ser comparada con lo que está realizando por Lufthansa desde diciembre 2010, cuando se anunció la reconfiguración de 180 aviones de la flota europea, instalando la “Neue Europa Kabine”. Este nuevo diseño contempla la colocación de asientos más delgados, cuya instalación permite colocar dos filas adicionales en cada avión (A319/A320/A321) y ofertar más de 2.000 asientos adicionales equivalentes a 12 A320. De acuerdo a Lufthansa, los cambios permiten disminuir el peso total de los aviones, reducción que incide en un ahorro de hasta 30% en el consumo de combustible (dependiendo del tipo de avión).

Desconociendo la previsión que tendrá la medida para la operación LAN, los resultados debieran ser similares a los de la compañía germana y constituirán una herramienta fundamental para alcanzar los objetivos fijados por la aerolínea nacional en materia de sostenibilidad.