Por Ricardo J. Delpiano
Supuestamente 2011 debía ser un año tranquilo para la industria aérea que acompañara los buenos resultados que la aviación tuvo durante el año pasado, asegurando así la recuperación del sector. Sin embargo nuevamente los cambios políticos en el mundo, ahora desde el Medio Oriente están comenzando a repercutir fuertemente en el transporte aéreo con la reducción de pasajeros y cancelación de vuelos a los países en crisis, afectando las operaciones de las líneas aéreas y por sobre todo el alza del precio del petróleo que está comenzando a impactar a la industria con un alza significativa que nos recuerda la crisis del petróleo del 2008.
Supuestamente 2011 debía ser un año tranquilo para la industria aérea que acompañara los buenos resultados que la aviación tuvo durante el año pasado, asegurando así la recuperación del sector. Sin embargo nuevamente los cambios políticos en el mundo, ahora desde el Medio Oriente están comenzando a repercutir fuertemente en el transporte aéreo con la reducción de pasajeros y cancelación de vuelos a los países en crisis, afectando las operaciones de las líneas aéreas y por sobre todo el alza del precio del petróleo que está comenzando a impactar a la industria con un alza significativa que nos recuerda la crisis del petróleo del 2008.
Si bien todavía no es adecuado lanzar un cierto pronóstico, el fantasma de la crisis del petróleo está latente, sobre todo tras la amenaza de Muamar Gadaffi de cerrar la llave de petróleo de su país. Si bien el Reino de Arabia Saudita desde Riyadh salió a calmar los mercados de petróleo indicando que estaría preparado para reforzar la producción proveniente desde Libia, el escenario es inestable donde el alza del precio del petróleo es un hecho que está comenzando a impactar fuertemente a los mercados internacionales, entre ellos la aviación, y por supuesto a nuestra vida diaria.
Esta crisis de los países del Medio Oriente nos recuerda a los movimientos políticos que está región clave del mundo (en términos culturales, políticos y económicos) vivió durante de los años 70 y 80 cuando revoluciones similares modificaron el status institucional de muchos de los países. A diferencia de los movimientos de esa época, los levantamientos populares tienen su base en el descontento de la población frente a la mantención del status quo de sus países y a los altos índices de desigualdad, pobreza, falta de oportunidades, que pese al crecimiento económico de los países no se han visto reflejadas en toda la población.
Medio Oriente está viviendo un cambio político trascendental, con repercusiones a nivel global. Foto: Facebook Egypt
Estos movimientos más que un cambio político local, afectan los intereses mundiales en una región esencial para la economía internacional, donde la estabilidad resulta imprescindible sobre todo para Occidente. A pesar de los llamados actuales de los países del oeste por cambios democráticos, muchos de ellos como Estados Unidos y Europa apoyaron gobiernos fuertemente autoritarios que pudieran dar una estabilidad política y económica, en lugar de democracias que supusiera alternancias de poder que podrían afectar los intereses. Gobiernos como los de Mubarak en Egipto son un ejemplo de ello. Si bien las revueltas comenzaron en Túnez, fue Egipto donde adquirieron mayor relevancia, ya que el “país de las dos tierras” es considerado como el referente político, cultural de la región y cualquier cambio puede repercutir al resto de los países, como efectivamente ocurrió, con movimientos en Estados adyacentes, aunque mucho más contenidos.
Con un poco más de un mes de revueltas, la crisis política del Medio Oriente y Norte de África está afectando al transporte aéreo con la reducción de frecuencias por parte de las compañías aéreas, y que tras la crisis en Egipto se manifestó fuertemente obligando a las aerolíneas reducir la capacidad ofrecida. Egyptair, una de las más emblemáticas compañías de la región y socia reciente de Star Alliance, indicó durante la semana que debido a la crisis se verá a obligada a reducir drásticamente un 25% su flota, poniendo en leasing aviones como sus nuevos Boeing 777-300ER incluso a hasta varios Embraer ERj170. La estrategia de Egyptair es ofrecer estos aviones en wet lease para no tener que despedir a pilotos y tripulaciones, confiando en que la crisis será algo pasajero, esperando reincorporar sus aviones en el corto plazo. La aerolínea ya está modificando sus itinerarios, en la medida que ha podido reanudar sus operaciones tras el derrocamiento de Mubarak.
Delta Air Lines suspendió también sus vuelos entre New York y Cairo hasta nuevo aviso e incluso la aerolínea global Emirates redujo sus frecuencias y capacidad entre Dubai y la capital egipcia. La intensificación del conflicto en Libia, obligó a las compañías europeas como Lufthansa, Alitalia, Austrian British Airways a suspender sus vuelos a Trípoli hasta nuevo aviso.
Como consecuencia del trasfondo político del Medio Oriente el precio del petróleo ha aumentado significativamente, obligando a las aerolíneas a adoptar medidas para enfrentar una posible nueva crisis. Foto: Ricardo J. Delpiano
La crisis política y alza del petróleo están empujando a las aerolíneas a tomar resguardos frente al nuevo escenario. Compañías españolas como Iberia, Spanair y Air Europa subieron el precio de sus pasajes para compensar el alza en los costos.
En Estados Unidos, Delta Air Lines reducirá este año su gasto de capital para enfrentar el alza de precios del combustible y asegurar sus objetivos de flujo de caja, además de avanzar rápidamente con la estandarización de su flota y el retiro de aviones más antiguos, especialmente los DC9 todavía en operación e incorporados tras la fusión con Northwest. United (United + Continental) anunció un sobrecargo de US$20 en todos sus pasajes, medida que también fue aplicada por American Airlines, según indicó el Wall Street Journal. El aumento del precio de combustible está elevando los costos operativos hasta en un 40% promedio, según se publicó en el diario de Nueva York.
Como parte del sistema internacional, Latinoamérica no está ausente y LAN ha sido la primera en decretar un alza en sus tarifas entre 8 a 12% en todos los vuelos internacionales de la compañía, para compensar el factor petróleo, el cual ha provocado un alza en los costos por US$99.7 millones.
A nivel internacional este año, la industria aérea deberá enfrentarse a la situación de recuperar alrededor de US$1.600 millones por costos derivados del alza del petróleo, el cual ya supera los US$100 el barril, según indicó IATA. Sólo el efecto pasajero del conflicto de los países del Medio Oriente podría entregar una calma al sector, evitando así que el factor petróleo perjudique la recuperación que las aerolíneas estaban viviendo.
1 comentario:
Lo de Gadafi al parecer son manotasos de ahogado porque él y sus mercenarios subsaharianos y los últimos leales que les queda estan arrinconados en la capital, asi que dudo que él tenga el poder para cortar la llave del petroleo.
Ademas no creo que Libia y Egipto sean grandes mercados aereos, este último por el turismo podría ser más importante pero me imagino se normalizará en los próximos meses.
Posiblemente las próximas revoluciones sean en Marruecos, Argelia, Jordania, Yemen, Omán, Bahrein o Siria, creo que Argelia, Omán y Bahrein son petrolíferamente importantes, ojalá que sean breves para que no alteren el suministro del vital elemento hidrocarburífero.
Muy buen blog
saludos
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