Con salida de Varig, GOL inicia una nueva etapa a través de la cual buscará salvar la operación en Chile

Por Ricardo J. Delpiano

Luego de una reorganización de sus vuelos hacia nuestro país -situación que estuvo acompañada por la salida del sistema de todos los vuelos de la compañía posterior al 14 de agosto y avisos desde la plataforma del fin de sus operaciones en nuestro país-, GOL, la principal aerolínea low cost de Latinoamérica y uno de los más importantes operadores aéreos de la región, comienza en el día de hoy una nueva etapa en Chile, marcada por una significativa reducción de su oferta.

De acuerdo a lo informado oficialmente por la compañía, los vuelos de GOL a Santiago de Chile se concentrarán en sólo una frecuencia diaria cubriendo la ruta Río de Janeiro-Sao Paulo-Buenos Aires-Santiago, saliendo por las tardes de Brasil para arribar a Santiago de Chile pasado medianoche, mientras que los vuelos de regreso partirán hacia Buenos Aires a primera hora de la mañana. La nueva operación significó la eliminación del segundo vuelo diario de la compañía con destino a Buenos Aires y Porto Alegre, además del fin de los servicios sin escala entre Santiago y Sao Paulo, que estaban siendo operados por Varig.

GOL inicia una nueva etapa en sus operación a Santiago. Esta supone la reducción de frecuencias y la salida de la marca Varig del mercado aéreo chileno. Foto: Alejandro Ruiz.

Si se consideran las dos administraciones de Varig (la antigua y la actual bajo propiedad del grupo GOL) está es la segunda oportunidad en que la aerolínea brasilera se retira del mercado chileno, proceso que a diferencia del anterior, se produce por un acomodamiento en la capacidad operativa de su aerolínea controladora –GOL- tras los bajos resultados obtenidos por la marca adquirida, a través de la cual la aerolínea de bajo coste intentó ampliar su presencia en los mercados internacionales, tanto dentro de Sudamérica, como en Europa y Estados Unidos.

Cuando el Grupo GOL adquirió Varig en el 2007, la compañía se enfocó en recuperar los servicios de la histórica empresa, a través de una estructura simple y que concentraría sólo los principales mercados internacionales. Basado en una estrategia de costes bajos, la nueva Varig reinició sus operaciones con aviones Boeing 767-300ER a destinos europeos, como París, Milán y Madrid, seguido por expansión en la región con vuelos hacia Santiago, Buenos Aires, Bogotá y Caracas, los cuales complementaban la oferta que ya el grupo GOL tenía en esos destinos y que permitían apuntar a dos tipos de mercado: tradicional (Varig) y low cost (GOL).

Sin embargo, los cambios en los escenarios marcados en parte por el auge de la competencia –TAM principalmente- y los bajos resultados obtenidos por la nueva filosofía de servicios dela nueva Varig, sumado a la falta de una red de rutas considerable, mitigaron los planes de la compañía, obligando al Grupo GOL a reestructurar nuevamente la empresa. Estos cambios supusieron el cierre de todas las rutas de largo alcance y la salida de todo los Boeing 767s de la flota, los cuales fueron reemplazados por Boeing 737-800, similares a los que GOL utiliza, lo cual permitía disminuir los costos por concepto de flota. Con el objeto de continuar reduciendo los costos operativos para hacer frente a las adversidades de la industria, marcada el año pasado por el alza de los precios del combustible seguida de la baja considerable de la demanda, GOL y Varig iniciaron un proceso de integración paulatina que terminó con la fusión de ambas empresas a fines del pasado año, asunto que fue seguido de cerca y propiciado por la Agencia Nacional de Aviación Civil de Brasil. Esta nueva etapa volvió a significar cambios en la operación de ambas líneas aéreas, donde GOL iría asumiendo todos los vuelos domésticos en Brasil y los tramos de corto alcance en rutas internacionales, mientras que Varig se concentraría en rutas internacionales en Sudamérica (Bogotá, Buenos Aires, Caracas y Santiago). En el caso de Chile, la aerolínea pasó a operar los vuelos sin escalas entre Sao Paulo-Santiago, abandonado por GOL debido a sus bajos factores de ocupación. Con el fin de adecuar el producto de bajo coste a los vuelos superiores a tres horas de duración, Varig puso en marcha nuevos productos, como la Comfort Class, una especie de Business regional, utilizando el concepto de cabina flexible de sus aviones. Además la compañía desarrolló importantes iniciativas para capturar al pasajero de negocios, que en el caso de Chile se reflejó en la unión de GOL a la Cámara de Comercio de Santiago en octubre del año pasado, con el objeto de satisfacer las necesidades de viaje de las 1.300 empresas que participan en la entidad.

Tras sus bajos resultados en rutas internacionales, GOL tuvo que realizar cambios la nueva Varig, eliminando los vuelos de largo alcance y eliminando de su flota el Boeing 767-300ERs. Foto: Alejandro Ruiz.

Pese a los cambios, la fuerte caída en la demanda producto de la crisis internacional -agravada los últimos meses por las consecuencias mediáticas de la enfermedad AH1N1-, y el auge de la competencia, afectaron nuevamente las operaciones del grupo GOL, el cual vio una caída de sus factores de ocupación en rutas internacionales por debajo del 47% para mayo 2009. Esto motivo nuevos ajustes, como la eliminación de rutas y reestructuración de los servicios, como el fin de los vuelos entre Santiago y Lima en junio y la reducción a sólo dos frecuencias semanales los vuelos sin escala a Sao Paulo por parte de Varig.

En medio de unos esquivos resultados y de la compleja situación internacional por la cual atraviesan las aerolíneas, GOL ha replanteado su esquema de negocios, dejando en segundo lugar el mercado internacional para concentrarse en las rutas internas de Brasil, donde la compañía mantiene su éxito y que le ha llevado a obtener récords en el transporte de pasajeros, lo que le ha permitido asegurar ingresos. Según el último reporte de GOL, la compañía reportó una ganancia neta de 353,7 millones de reales (192 millones de dólares), dejando atrás las pérdidas de 166,5 millones de reales reportadas en el mismo periodo del año anterior. Pese a los ingresos, la compañía vio una caída en 4,8% en la facturación, al igual que los ingresos respecto al primer trimestre cuando registró un alza de 4,8% más que para el periodo abril-junio. En un comunicado de la empresa, GOL aseguró que “mantiene el objetivo de mejorar las ganancias, para lo que reducirá costes y capacidad, al mismo tiempo que aumentará el factor de ocupación de sus aviones tanto como fuera posible. Esto asegurará unos resultados sólidos”. En esa línea se entiende que es posible esperar nuevos ajustes en la malla operacional de la línea aérea en todas las rutas donde opera. Paralelamente GOL ha iniciado vuelos desde Brasil a Punta Cana para aprovechar el alto flujo de turistas entre Brasil y República Dominicana.