sábado, 7 de marzo de 2020

Líneas aéreas comienzan a dar flexibilidad a los viajes de sus pasajeros en la región y llaman a los Gobiernos a adoptar medidas excepcionales por COVID-19

Por Ricardo J. Delpiano

Boeing 787-8 sunset (S.Blaise)
Foto: S.Blaise
A pesar de que América Latina sea quizás la región menos afectada por la contingencia generada por el COVID-19, el impacto de esta situación de salud pública mundial también se hará sentir con fuerza en la región. La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) señala que la demanda de transporte aéreo en la región no está relacionada con el impacto del COVID-19. La debilidad con una caída de 3,7% en la demanda registrada en enero está marcada por los acontecimientos políticos y hechos de insurrección, además de la debilidad de algunas economías, tal como se menciona en febrero.

Pese a lo anterior, algunas líneas aéreas han adoptado la decisión de comenzar dar flexibilidad para los pasajeros con viajes inmediatos comprometidos, especialmente en los vuelos internacionales, que en la región corresponde al segmento más afectado. En ese contexto, algunas compañías toman medidas como ocurre con Aeroméxico, Avianca o LATAM, así como Air France – KLM, principal transportista aéreo en la región hacia Europa con protagonismo en conectividad con importantes regiones en el mundo como, por ejemplo, Asia.

Desde el 03 de marzo, Aeroméxico tiene reducidos sus vuelos hacia Seúl (ICN). De un vuelo diario pasa a uno cada dos días. Los pasajeros afectados en sus itinerarios disponen en esta compañía una política de protección que no considera cobros de cargos por cambio de fecha ni diferencia tarifaria, siempre y cuando se respete la ruta y clase pagada. En el caso de los vuelos a Italia operados en código compartido tampoco cobra cargos por cambio de vuelo. Si el pasajero realiza un cambio de ruta debe pagar la diferencia de precio entre el pasaje al destino inicial y el nuevo.

Ante el contexto mundial de la propagación de COVID-19, LATAM anuncia nuevas medidas de flexibilidad que facilitarán la decisión de viaje de los pasajeros. Entre 06 y el 22 de marzo de 2020, la mayor línea aérea de Latinoamérica posibilitará a sus clientes, con reservas de vuelos internacionales hasta el 31 de diciembre de 2020, que agenden sus viajes con la opción de realizar un cambio de fecha y/o destino más adelante. Se permite un cambio por ticket, sin multa, hasta 14 días antes de la salida del vuelo de ida, sujeto a diferencias tarifarias.

“Entendemos la preocupación que nuestros clientes podrían tener sobre realizar un viaje internacional en este momento. Es por eso que queremos brindarles la oportunidad de reservar vuelos internacionales, sabiendo que podrán cambiarlos si así lo desean”, dice Yanina Manassa, directora de Servicio al Cliente, LATAM Airlines Group.

El 02 de marzo, LATAM informa la suspensión temporal de la ruta Sao Paulo (GRU) - Milán (MXP) como medida preventiva ante el brote de COVID-19 en el norte italiano y una disminución significativa de la demanda. La compañía ha señalado que no planea suspender otra ruta y que la afección de la medida no es significativa.

En Avianca, los pasajeros con pasaje emitido hasta el 31 de enero de 2020 con origen o destino China o hasta el 26 de febrero de 2020 con origen o destino Italia, ambos en código compartido o acuerdo interlínea, tienen habilitado la opción de cambio de fecha de pasaje o de destino en la misma clase tarifaria sin cobro de penalidad. Explica que se puede hacer cambio de ruta a cualquier destino operado por Avianca Holdings efectuado en un plazo de un año a partir de la fecha de emisión y con la excepción de penalidad por una vez. “El cambio de itinerario puede generar diferencias tarifarias que no cubre la exoneración y deberá pagar el cliente. Estas medidas no aplican para los viajeros que presenten pérdidas de conexión o que no se presenten al vuelo. Así mismo, es importante tener en cuenta que el reembolso aplica según condiciones de la tarifa y no hay exoneración especial frente a ello. Adicionalmente, por tratarse de un factor externo, para esta situación no aplica ningún tipo de compensación”, explican.

Por los destinos que atienden, Aeroméxico y LATAM son las líneas aéreas más expuestas a los brotes de COVID-19 en Asia y Europa. Sin embargo, todas las líneas aéreas con vuelos intercontinentales tienen un mayor grado de exposición en comparación las que operan dentro de la región. Recientemente, Aerolíneas Argentinas también ha informado una reducción de su oferta en la ruta Buenos Aires (EZE) - Roma.  

Como uno de los principales transportistas desde América Latina a Europa y Asia, Air France – KLM señala a sus pasajeros que pueden seguir reservando sus viajes con tranquilidad con la garantía de que pueden cambiar sus reservas si así lo desean sin cargo. “Desde el brote del virus COVID-19, conocido popularmente como el coronavirus, Air France y KLM han hecho todo lo que está a su alcance para ayudar a sus clientes y permitirles posponer o cancelar viajes planificados hacia y desde las áreas con riesgo de exposición”.

Las aerolíneas del holding franco-holandés extienden sus políticas de flexibilidad a toda la red del grupo para reservas ya realizadas como para las futuras hasta final de mes. “Por lo tanto, el cliente puede reservar su próximo viaje con confianza, con la garantía de poder modificar su reserva, si así lo desea, sin costo adicional”, dicen.

Si el pasajero tiene un boleto de Air France o KLM, emitido hasta el 31 de marzo de 2020 inclusive, y válido para un vuelo programado hasta el 31 de mayo de 2020, independientemente del destino, puede posponer su viaje sin costo adicional para un vuelo posterior al mismo destino hasta el 31 de mayo de 2020, siempre que sea en la misma clase de reserva original. También puede optar por posponer la salida después del 31 de mayo de 2020, cambiar el destino o cancelar el viaje. En estos casos, las compañías ofrecen un cupón (voucher) no reembolsable válido por un año y que puede ser utilizado en vuelos operados por Air France y KLM.

IATA ha actualizado el análisis de impacto financiero para la contingencia que está provocando el COVID-19. Ahora considera pérdidas de ingresos para este año entre US$63 mil millones (para un escenario en el que el virus está contenido) y US$113 mil millones (si la situación se extiende más allá). Sin embargo, aclara que aún no hay estimaciones disponibles para el impacto en las operaciones de carga.

El análisis previo (emitido el 20 de febrero de 2020) fija la pérdida de ingresos en US$29,3 mil millones de dólares en un escenario que vería el impacto de COVID-19 en gran parte limitado a los mercados asiáticos. Sin embargo, con la extensión del virus a 80 países y la caída de la demanda obliga a realizar nuevas previsiones. La Asociación que agrupa a la mayoría de las compañías aéreas reconoce que el COVID-19 se está haciendo sentir con fuerza en la industria. Los precios de las acciones de algunas líneas aéreas han caído un 25,0% desde que comienza el brote, valor porcentual en 21 puntos más que la disminución ocurrida en un mismo periodo bajo la crisis del SARS.

“El giro de los eventos como resultado de COVID-19 es casi sin precedentes. En poco más de dos meses, las perspectivas de la industria en gran parte del mundo han empeorado dramáticamente. No está claro cómo se desarrollará el virus, pero si vemos el impacto contenido en algunos mercados y una pérdida de ingresos de US$63 mil millones, o un impacto más amplio que conduzca a una pérdida de ingresos de US$113 mil millones, esta es una crisis”, explica Alexandre De Juniac, director general y CEO de IATA.

Agrega que muchas aerolíneas están reduciendo la oferta y tomando medidas para reducir los costos. Ejemplos de ello, son las compañías asiáticas como Cathay Pacific, Hainan Airlines o Lufthansa. Las más afectadas son aquellas con situación financiera más débiles como ocurre con el HNA Group, Cathay Pacific o Flybe que recientemente ha dejado de operar. Se espera que la crisis también golpee a Alitalia por el brote que existe en su país de origen.

Para ayudar a sortear la crisis, De Juniac insta a los Gobiernos a buscar medidas de estímulo. “La industria de las aerolíneas necesitará consideración para el alivio de impuestos, cargos y asignación de franjas horarias. Estos son tiempos extraordinarios", dice.

En América Latina, la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA) solicita a las autoridades correspondientes mantener contacto fluido con las líneas aéreas a fin de informar y coordinar de manera efectiva cualquier medida de control de ingreso o formulario de salud requeridos por los distintos Estados. Al igual que IATA, pide flexibilizar las reglas de asignación de slots en aeropuertos como medida excepcional para garantizar que las bajas de demanda o cancelaciones de vuelos no afecten los cumplimientos históricos de las aerolíneas necesarios para la planificación de la siguiente temporada de vuelos. Además, solicita reducir de manera general los costos a la industria y condiciones laborales para atenuar la afección causada por la contingencia.

Los pedidos de IATA y ALTA hacia los Gobiernos en términos de reducción de costos o condiciones laborales se entienden no como una medida especial, sino por ser el transporte aéreo una industria vital para el funcionamiento de la economía y aporte permanente al desarrollo social de los países. La reducción de operaciones y rutas tiene una directa relación en el empleo directo y también indirecto en los países, comprometiendo también toda la cadena de valor. 

“La industria aérea por naturaleza genera márgenes muy bajos y la afectación del COVID-19 en la actividad económica supone un riesgo para la subsistencia de numerosas aerolíneas y compañías de la industria, que son un motor para múltiples sectores de la economía global”, explican desde ALTA.

La aviación latinoamericana viene creciendo consecutivamente por seis años registrando más de 300 millones de pasajeros transportados. Por lo mismo, se consolida como un motor importante de las economías y de los empleos. Según datos del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), representa el 15,5% del PIB del Caribe y el 9,3% de América Latina y generando el 13,5% de los empleos en el Caribe y el 8,2% en América Latina. “Se trata de una industria de extrema relevancia para el bienestar económico, social y político de la región y por ello vemos con gran preocupación el creciente impacto que tiene el COVID-19 en toda la cadena de valor del transporte aéreo, en los pasajeros, el sector turístico y, finalmente, en una potencial desestabilización financiera de las naciones de la región”, advierte ALTA.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Ricardo sabes si Jetsmart tomará medidas? Llame para reembolsar un vuelo a Brasil y me dicen que no, lo encuentro muy irresponsable y no se que podría hacer ya que claramente no tengo intenciones de viajar

Ricardo J. Delpiano dijo...

Hola

Todas las medidas que están tomando algunas líneas aéreas son voluntarias. Depende de cada una y qué medidas adopta frente a este problema de salud mundial. La mayoría de las flexibilidades se concentran en rutas internacionales hacia países muy afectados, probablemente JetSMART -como otras- por las rutas en las que opera no considere aún medidas adicionales.

Saludos,
Ricardo J. Delpiano

Anónimo dijo...

Bue, ni que tuvieras un vuelo a wuhan

Anónimo dijo...

Solo por curiosidad, porque no alguien cancelaría un viaje a Brasil por el coronavirus? Tienen 19 contagiados, con el primero reportado hace 12 días en una población de 210 millones en un país mucho mas conectado con los países en riesgo.

Versus Chilito 9 casos, con el primero reportado hace 5 días y con menos del 10% de la población de Brasil.

Osea por simple matemática, es mas posible que te contagies en Chile