jueves, 27 de abril de 2017

Emirates sufre el “efecto Trump” y prepara reducción de vuelos a Estados Unidos

Por Ricardo J. Delpiano

Emirates A380 en vuelo (Airbus)
Foto: Airbus
Han sido pocas las veces en que se han conocidos reducciones de vuelos en Emirates, una aerolínea que términos mediáticos siempre se la ha asociado a sólo crecimientos. Pero en que puede ser su primera vez, la principal aerolínea de Dubái y de los Emiratos Árabes Unidos, enfrenta un escenario más desafiante a nivel global provocado por una “ola más proteccionista”, que en el caso de Estados Unidos, se asocia a las medidas impulsadas por la Presidencia de Donald Trump.

Si bien por ahora se descarta el cierre de rutas si está decidido la reducción de frecuencias en cinco de un total de 12 destinos que opera actualmente, todos sin escalas desde su hub en Dubái. La razón responde a la baja demanda que se ha provocado en los últimos meses con el aumento de las exigencias para las visas con el bloqueo a ciudadanos de ciertos países con religión mayoritaria musulmana y el reciente “baneo electrónico” que impide a los pasajeros llevar equipos electrónicos en cabina desde ciertos aeropuertos –Dubái, incluido- en vuelos directos a Estados Unidos.

“Las recientes medidas tomadas por el Gobierno de los Estados Unidos referidas al otorgamiento de visas de entrada, aumento de la vigilancia bajo razones de seguridad y las restricciones a los equipos electrónicos personales en las cabinas de los aviones, están teniendo un impacto en los intereses de los consumidores y en la demanda de viajes aéreos hacia los Estados Unidos”, ha dicho un vocero de la aerolínea a la prensa estadounidense.

De acuerdo con la compañía, desde mayo los vuelos a Fort Lauderdale y Orlando pasarán de diario a cinco vuelos semanales, mientras que se reducirá a un vuelo diario los servicios a Seattle, Boston (desde 1 y 2 de junio, respectivamente), Los Ángeles (desde 1º de julio), en lugar de los dos servicios al día que hoy se operan.

Además de las medidas de la administración estadounidense, la compañía con base y hub en Dubái, se ha visto afectada por un aumento de la competencia debido a que otros competidores están adquiriendo capacidad para volar sin escalas en rutas de ultra larga distancia, quitándole una cuota de mercado a Emirates que se acentúa aún más por el escenario impuesto bajo la “era Trump”. Como ejemplos están la expansión de Air India, que recientemente ha lanzado vuelos sin escalas desde su país a nuevas ciudades de Estados Unidos, el crecimiento de Saudia, una recuperación de Kuwait Airways, entre otras.

Si bien ese último factor era algo previsible considerando los pedidos de aeronaves que cada línea aérea ha venido realizado, Emirates vincula el deterioro de la demanda directamente con las restricciones colocadas por el Presidente Trump.

“Hasta el comienzo de 2017, las operaciones de Emirates a los Estados Unidos han registrado un crecimiento y comportamiento saludable, impulsada por una demanda de clientes que busca un producto de alta calidad –como el nuestro- y conexiones internacionales”, ha sido una de las afirmaciones con la que Emirates explica la situación. Agrega que el deterioro se aprecia en todos los segmentos del viaje, por lo que se concluye que el impacto ha sido transversal.

Marcando la diferencia con sus vecinos en Abu Dhabi y Doha, que en conjunto conforman las llamadas tres grandes aerolíneas globales del Medio Oriente (ME3), Emirates dice que la reducción se justifica porque la compañía funciona bajo criterios comerciales y se debe mantener la rentabilidad del negocio.

Como resultado de estas medidas, Emirates se verá obligada a reubicar capacidad colocando los aviones que salen de estas frecuencias en otros destinos que ya opera. Si el escenario se mantiene, se podría visualizar el lanzamiento de nuevas rutas o bien la detención de algunos aviones. Algunos de estos efectos ya se han comenzado apreciar, como por ejemplo, la colocación del Airbus A380 en la ruta Dubái – Sao Paulo (GRU).

Las otras dos ME3 no han expresado reducciones a pesar de que Etihad se encuentra en un proceso de “stand by” por una situación interna y de sus socios y que Qatar Airways también ha visto una caída de la demanda en vuelos a Estados Unidos. Según CNN Money, Su Excelencia Akbar Al Baker, CEO de Qatar Airways, “el descenso de la demanda ha sido menos del 10% y ha dicho que el baneo electrónico no hará que los vuelos hacia Estados Unidos sean más seguros de lo que ya son”.

Si Emirates decide reducir más frecuencias en otros destinos en los Estados Unidos y si Etihad o Qatar Airways no asumen un comportamiento similar, la contracción de la aerolínea de Dubái puede ser una oportunidad para mejorar los rendimientos de las otras dos y los factores de ocupación.

A fecha de hoy, Emirates vuela sin escalas desde Dubái hacia Boston, Chicago (ORD), Dallas Fort Worth, Fort Lauderdale, Houston (IAH), Los Ángeles, Nueva York (JFK), Newark, Orlando, San Francisco, Seattle y Washington DC (IAD). En los Estados Unidos, Emirates trabaja con JetBlue, principal alimentadora de su ruta a Fort Lauderdale.

Qatar Airways vuela desde Doha a Atlanta, Boston, Dallas Fort Worth, Filadelfia, Houston (IAH), Los Ángeles, Miami, Nueva York (JFK) y Washington DC. Para 2018, proyecta incluir también a Las Vegas. La compañía tiene acuerdos de cooperación de código compartido con American Airlines, su socia en oneworld.

Por su parte, Etihad vuela desde Abu Dhabi hacia Chicago (ORD), Dallas Fort Worth, Los Ángeles, Nueva York (JFK), San Francisco y Washington DC (IAD). En el país norteamericano mantiene una cooperación con American Airlines y JetBlue.

1 comentario:

Christian Jiménez dijo...

¿Y podemos pensar que las medidas de Trump también fueron pensadas para afectar a las ME3? La industria aérea en USA ha estado bastante inconforme con ellas, en especial por supuestas prácticas que están por fuera de mercado.