Por Ricardo J. Delpiano
Foto: S.Blaise |
Para el año completo de 2016, American reporta ingresos (GAAP) previos a impuestos de US$ 4.300 millones e ingresos previos a impuestos excluyendo cargos netos especiales de US$ 5.100 millones. La cifra que se obtiene es inferior si se compara con los ingresos (GAAP) previos a impuestos de 2015 por US$ 4.600 millones e ingresos previos a impuestos excluyendo cargos netos especiales por US$ 6.300 millones.
Si bien los ingresos fueron menores, la compañía con base en Dallas Ft. Worth consigue amortizar el nivel de gastos que se mantuvieron planos entre los meses de enero y diciembre, lo que representa un punto importante para la administración. Según el reporte de la línea aérea los ingresos operacionales fueron US$ 40,2 mil millones, un 2,0% en comparación inter anual. El ingreso por asientos y milla recorrida para 2016 se situaron en 14,70 centavos de dólar lo que representa una baja de 3,7 puntos porcentuales en comparación a 2015.
“El equipo de American Airlines continuó produciendo resultados extraordinarios en el 2016, y el público lo está notando. Air Transport World (ATW) nombró a American como su Aerolínea del Año 2017, citando el trabajo de integración de nuestro equipo, las mejoras operacionales y de servicio al cliente y las inversiones significativas que estamos haciendo en nuestro producto. Este reconocimiento se debe totalmente al gran trabajo de nuestros 120,000 empleados”, ha señalado Doug Parker, presidente y CEO de American Airlines, al comentar los resultados obtenidos.
En términos operacionales para el año 2016, el tráfico de pasajeros de la red consolidada de American Airlines logra crecer muy ligeramente un 0,2% con 223,5 mil pasajeros pagos por milla recorrida. La capacidad aumenta un 1,7% con un total de 273,4 mil asientos como resultado de la incorporación de nuevos aviones, aumento de las rutas así como de la salida de material antiguo y menos eficiente. El factor de ocupación promedio cierra en 81,7% con una baja de 1,3 puntos porcentuales en comparación al año anterior.
Algunas de las mejoras obtenidas en 2016 fueron la aprobación de un nuevo contrato por parte de 300 instructores de tripulaciones de vuelo, 144 ingenieros de simuladores y 15.000 pilotos que se integraron a un único régimen de vuelo permitiendo que American optimizara sus recursos con la relocación de tripulaciones para la rotación de aeronaves en función de la demanda. En servicio, se introdujo el Boeing 787-9 que representó el debut de la Premium Economy como nueva clase de servicio, se aumentó la red destacando los servicios regulares a Cuba y la aprobación de la ruta Los Ángeles – Beijing como parte de la expansión de la compañía a Asia. Además, hubieron mejoras en el aeropuerto de Chicago (ORD) con una reducción del 30% en tiempo en los filtros de seguridad 7 gracias a la cooperación con la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) y la ampliación del Concourse F en el aeropuerto de Filadelfia.
Como muchas compañías en los Estados Unidos y en el mundo, American Airlines enfrenta una fuerte competencia por la expansión de otros actores en el mercado y la mayor participación que las líneas aéreas de bajo costo y tarifas bajas están ganando en el mercado, especialmente en el segmento medio como las que conectan Estados Unidos con América Latina y el Caribe. En ese escenario, destacan el ingreso del subsegmento de ultra bajo costo (ULCC) representado en aerolíneas como Frontier y Spirit, además de la expansión de compañías híbridas como JetBlue, además de otras fuera de los Estados Unidos.
Por lo mismo, durante 2017 American apuesta por continuar mejorando su oferta de productos para retener a sus clientes, además de introducir medidas comerciales que le permitan sumar nuevos pasajeros y competir de igual a igual con las compañías del tipo LCC o ULCC.
“Entrando al 2017, continuaremos haciéndole mejoras a American a través de nuevas iniciativas de producto. Estas incluyen Basic Economy, que continuará nuestra meta de ofrecer las tarifas y opciones correctas para cada cliente, y, en vuelos internacionales, nuestro producto Premium Economy. Y sin importar que cabina escojan nuestros clientes, serán transportados en la flota más joven entre nuestros competidores más grandes en los Estados Unidos”, agrega el directivo. Basic Economy es una nueva clase tarifaria que ofrece al viajero sólo la posibilidad de viajar pagando extra por cada servicio adicional que desee consumir. United fue la primera en introducirla y otras líneas como el caso de American Airlines y Delta, le han seguido para competir con todo el segmento LCC.
American Airlines confía que la combinación de sus nuevos productos, que incluyen la modernización de la flota, cabinas y nuevos ambientes en los aeropuertos, y las mejoras operacionales tendrán un impacto positivo entre sus clientes, y la ayudarán a compensar el avance de las aerolíneas de descuento. Asimismo, mantiene la previsión de un escenario positivo por una mayor demanda de viajes la que se puede incentivar con las bajas tarifas que busca ofrecer.
“Nuestras inversiones en el producto se están reflejando en el comportamiento de nuestra unidad ingreso. Tuvimos la mejora más grande en nuestra unidad de ingreso entre todos nuestros competidores y, a medida que miramos hacia el futuro, continuamos viendo una alta demanda por transporte aéreo y mejores rendimientos”, puntualiza Parker.
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