sábado, 9 de abril de 2016

American Airlines anticipa una “inigualable y valiosa” operación a Cuba por la experiencia adquirida en sus chárter a la isla

Por Ricardo J. Delpiano

American Airlines B737-800 en DFW (RD)
Foto: Ricardo J. Delpiano
Probablemente asociar a American Airlines con un servicio de 25 años a Cuba sea extraño para los lectores y la comunidad internacional. Sin embargo, pese a las barreras políticas existentes, la compañía estadounidense ha desempeñado un rol importante en la conectividad desde y hacia la isla.

El 5 de abril de 1991 American Airlines comenzó sus vuelos chárter hacia Cuba con un vuelo entre Miami y La Habana, una operación histórica considerando el término reciente de la Guerra Fría y un temprano inicio de una era unimultipolar en el sistema internacional. El día 5 recién pasado se cumplieron 25 años de aquel histórico vuelo, ahora dentro un marco totalmente diferente marcado por la reanudación de la conectividad aérea regular entre los Estados Unidos y Cuba, como símbolo de una nueva era.

Leo Rodríguez, operario en el aeropuerto Miami Dade, ha coordinado los vuelos de American Airlines hacia Cuba, y ad portas del inicio de los vuelos regulares, recuerda que “en aquel entonces, ir a Cuba era ir como a la luna”, haciendo referencia a las limitaciones existentes para viajar. Desde su puesto de trabajo reflexiona acerca del día que viera ir y venir vuelos regulares entre dos territorios cercanos. “Siempre pensé que nuestro trabajo era importante y que estábamos sentando las bases para una operación regular. Ha sido realmente emocionante porque hemos sido los pioneros”.

La experiencia de Rodríguez ha sido rescatada por la propia American para mostrar el trabajo construido con 25 años de operaciones chárter. Tiene 35 años como empleado de la aerolínea y al igual que otros empleados y cubanos residentes en Florida está optimista sobre el inicio de los vuelos a Cuba. Se siente honrado de haber tenido un papel en el proceso. “Va a ser la culminación de 25 años de trabajo. Hemos trabajado arduamente y todo ese esfuerzo está a punto de dar sus frutos. Estoy orgulloso de haber sido parte de algo que está a punto de dar a luz a algo aún más grande”.

American Airlines será la aerolínea con mayor protagonismo en la reanudación de los vuelos comerciales regulares entre los Estados Unidos y Cuba. En el mes de marzo, presentó una solicitud al Departamento de Transporte de los Estados Unidos con la propuesta de operar servicio regular que incluye 10 frecuencias diarias desde Miami a La Habana y servicio adicional a La Habana desde los hubs de American en Charlotte, Dallas Fort Worth, Chicago (ORD) y Los Ángeles. La solicitud también incluye servicios diarios entre Miami y otras cinco ciudades cubanas.

Por la experiencia adquirida, el número de frecuencias a operar y la relación estrecha con la gente de Florida, American Airlines considera que el inicio de sus vuelos a Cuba será una “inigualable y valiosa experiencia” que marcará la diferencia con el resto de sus competidores que también esperan volar a la isla. Los vuelos a Cuba llegan en un momento distinto, con una nueva American que se caracteriza por la renovación tanto en aeropuertos y aviones, como la vocación de servicio de todo su personal, además de una mayor conectividad como resultado de una exitosa fusión con US Airways.

“Además de la abundante experiencia y familiaridad de American con las operaciones en tierra de Cuba, ninguna aerolínea tiene un compromiso más grande con el Condado de Miami-Dade –el corazón y alma de la comunidad cubano-americana y hogar de casi el 50 por ciento de la población cubano-americana en los Estados Unidos. American es el líder indiscutible entre todas las aerolíneas que sirven a la gente y negocios de Miami-Dade, y ofrece conectividad inigualable a través de su centro de conexiones en Miami”, destaca la aerolínea. 

Las operaciones a Cuba por parte de American no sólo beneficiará a los cubano estadounidenses residentes en Florida y otras partes de los Estados Unidos, sino que también a un número importante de viajeros latinoamericanos que a través del hub de Miami podrán acceder fácilmente a la capital como a las principales ciudades cubana.

Considerando la cantidad de frecuencias a operar como el incremento de capacidad que American ha realizado en muchas rutas en la región, ya sea en frecuencias como en cantidad de asientos por avión, se espera que la operación sea ampliamente beneficiosa y accesible, que puede verse reflejado en el precio de los pasajes y paquetes turísticos. En ese contexto y considerando el mercado latinoamericano, American Airlines está llamada a transformarse en un activo competidor hacia/desde el mercado cubano que puede incluso disputar el lugar a otras compañías que por los años en los que rigió la restricción de vuelos se beneficiaron de una cierta exclusividad.

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