martes, 10 de diciembre de 2013

DGAC Chile: “Queremos avanzar en forma coordinada con muchos estamentos para el desarrollo de la Nación”

Por Ricardo J. Delpiano

Foto: DGAC
Con más de 15 millones de pasajeros embarcados a cifras de 2012, Chile se aproxima conseguir la relación de operar un viaje en avión por cada habitante del país. Un dato no menor, que ejemplifica parte del desarrollo económico alcanzado por el país en los últimos años y en la capacidad de su sector aéreo, por generar instancias que permitan sumar nuevos pasajeros, proporcionar una mayor conectividad y una mayor inclusión de la población.

Tener un transporte aéreo a tasas cercanas a la de los países desarrollados sin dudas genera satisfacción pero también enormes desafíos. La Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC Chile) como la Autoridad Aérea del país, es consciente de esta realidad y por ello, ha orientado su trabajo para convertirse en una institución de servicio público inteligente con un carácter predictivo que permita adelantarse a lo que se viene.

Al comentar sobre el panorama de la aviación chilena, su director, el General de Aviación Jaime Alarcón Pérez, destaca los logros que Chile ha conseguido. “Son metas que uno va alcanzando. Los Estados no se desarrollan por sí solos, sino que avanzan porque hay una creciente demanda y existe una capacidad de cada industria para generar puestos de trabajo. Eso influye en la mayor capacidad de gasto de las personas y en nuevas oportunidades”.

Con tasas significativas de crecimiento -que el año pasado alcanzaron a más del 17%-, Chile posee un mercado aéreo en constante dinamismo y que se proyecta como un medio masivo de transporte. “Ya no viaja el tipo de cuello y corbata. Hoy todos quieren optimizar su tiempo tanto para trabajar como para el ocio, para ir de un lugar a otro, para conocer.”, cuenta.

Para la DGAC, esta realidad hace que el sistema se vuelva más complejo. “Antes los vuelos eran entre las ocho de la mañana y las cinco de la tarde. Hoy en día, existen espacios para muchas actividades. Los mismos operadores optimizan su tiempo, organizan itinerarios para satisfacer a sus clientes que son los pasajeros. Hay compañías grandes y chicas, también están las regionales que están emergiendo. Esto significa que la complejidad en la administración del espacio aéreo también está aumentando”, dice el director.

Para enfrentar este escenario, la DGAC apunta sus esfuerzos en buscar la mejor competencia de su personal con el fin de dar la satisfacción correspondiente al usuario. Según el General Alarcón, el elemento clave es la implementación de una mirada de futuro que permita anticipar los hechos.

En ese sentido y como desafío más inmediato, señala: “Queremos avanzar en forma coordinada con muchos estamentos para el desarrollo de la Nación”. Una coordinación intersectorial y consecuente con la industria, es lo que trasmite. “Eso permite que avancemos en forma pareja y balanceada, que se traduce en el bienestar de las personas”, agrega.

Con los niveles alcanzados por la aviación chilena, el director de Aeronáutica no duda de lo que se viene hacia el futuro es grande, pero se siente confiado en el trabajo bien hecho y que permite ofrecer a los usuarios, un sistema aeronáutico seguro de primer nivel, reconocido mundialmente, gestionado con la última tecnología y administrado por un equipo de profesionales altamente competente. “Desafíos hay muchos, pero puedo destacar la enorme contribución que la DGAC hace al país”, dice.

En los próximos días, el General Jaime Alarcón dejará su cargo. Al revisar lo que fue su periodo al mando de la Institución, identifica como uno de sus logros, la capacidad de acercarse y de relacionarse con las personas que integran la DGAC. “Una de las visiones de nuestro plan estratégico es dar una valoración a nuestro personal y la capacidad de tenerlo motivado y feliz en la DGAC”.

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