Por Ricardo J. Delpiano
Con un ligero retraso del
plan inicial, PAL Airlines incorporará en los próximos días una aeronave
adicional con el cual la aerolínea buscará reforzar su actual flota. Se trata
del primero de un total de tres aviones que la compañía ligada a la familia
Musiet pretende incorporar durante el primer semestre de este año con la
intención de renovar material e incrementar la capacidad ofrecida.
El avión corresponde a un
Boeing 737-300 fabricado en 1996 y entregado ese mismo año GECAS. Su primer
operador fue British Midland (BMI), compañía que lo operó hasta 2005, ese año
con su división low cost BMI Baby. Posteriormente, pasó a incorporar a la flota
de Air China por un periodo de cinco años hasta devuelto a su propietario en
junio de 2010. Un mes después, fue adquirido en leasing por la boliviana
Aerosur, recibiendo el registro CP-2656 y bautizado con el nombre de Sicurí,
luciendo en el fuselaje una serpiente.
El nuevo avión de PAL Airlines (CC-AIT) fotografiado en Cochabamba con el esquema de su último operador, la boliviana Aerosur. Foto: Fernando Ruiz
Pocos días antes de la quiebra
de la aerolínea, fue trasladado desde Cochabamba a Porto Alegre donde permaneció
hasta el día de hoy. En noviembre de 2012, la firma CARA Capital Corporation compró
la aeronave a GECAS y hasta no hace mucho se lo consideró como una futura
incorporación de la estatal BoA Boliviana de la Aviación, situación que no
llegó a ocurrir.
Hace unos días, PAL Airlines se convirtió en su nuevo operador y en el día de ayer fue registrado en Chile como CC-AIT. Actualmente, la aeronave se encuentra en Porto Alegre en un esquema completamente blanco y esperando su traslado al país, lo que debiera ocurrir en los próximos días. El avión está equipado con dos motores CFM56 y su última configuración interior fue de seis asientos en clase ejecutiva y 120 en económica.
PAL Airlines espera beneficiarse de la salida de material de otras compañías para continuar con el plan de flota anunciado. Las dos siguientes aeronaves debieran incorporarse en marzo y mayo, respectivamente. La compañía se ha fijado para este un año un crecimiento del 13% en las rutas domésticas al norte de Chile, trabajo que en parte estará dedicado a recuperar su rol en el tráfico minero, segmento en el cual se ha visto afectado por el ingreso de nuevos operadores.
Pese a su incorporación, la llegada de este avión no debiera significar un aumento de capacidad para la compañía, ya que una vez arribado se podría dar curso a la devolución de uno de los actuales B737-300 (CC-ACE).
En las últimas semanas, PAL Airlines ha conseguido operar algunos vuelos chárter para SINAMI, incluyendo algunas operaciones desde Concepción hacia el Norte del país. Además, volvió a atender el tráfico estival con vuelos chárter desde Santiago hacia destinos en el Caribe con un Airbus A330-300, operación que pese a la incertidumbre de los últimos días por la quiebra y reclamo del avión por parte de su propietario (Orizona-Orbest), no se vio afectada.
Según el reporte oficial de la Junta Aeronáutica Civil para enero, PAL Airlines posee una cuota de mercado de 2,4%, aunque con una caída de 26,5% en comparación a igual mes del año anterior. En el primer mes del año, registró un total de 25.526 pasajeros por kilómetro (-23%) con 63.619 asientos disponibles por kilómetro. El factor de ocupación promedio de los vuelos de la compañía se mantiene bajo con un 40,1%.
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